La Xunta de Galicia proyectará obras de mejora en campañas de refuerzo del firme en viales autonómicos que impulse en los próximos años a fin de continuar corrigiendo la deformacióndel transitado vial PO-214 –Baloira (A Estrada)-Pontecesures– que emprendió esta semana para resolver los problemas que presentaba la superficie rodada en ciertos tramos.
Personal técnico de la Xunta había determinado –según indicó el alcalde Jose López– que los tramos más deteriorados estaban en San Xurxo de Vea y Barcala. Para ello, la Xunta incluyó las obras de regulación de las deformaciones detectadas en un contrato que, además de incluir la mejora de la PO-214, también contemplaba mejoras de firme en los viales PO-221, PO-222, PO-223, PO-233 y PO-303 de los concellos de Pontecesures, Moraña, Pontevedra, Campo Lameiro, Cerdedo-Cotobade, Poio, Padrón Sanxenxo, Meaño y Cambados. De los 775.000 euros aportados por la Xunta para estas actuaciones, un total de 223.625 se destinaron al vial Baloira-Cesures en esta primera fase de obras.
Las obras –adjudicadas a Covsa– exigieron el corte al tráfico del vial entre el miércoles y el viernes. Las previsiones que barajaba la Xunta al inicio del corte era reabrir el vial el viernes al mediodía al favorecer el buen tiempo las obras. Ayer, el nuevo firme ya podía ser transitado por los usuarios, con precaución al encontrarse el vial sin pintar, como marcaba la señalización en el cruce por donde el miércoles se iniciaron las obras.