Nació hace 49 años en la parroquia lalinense de Donsión, a donde ha vuelto después de vivir en el poblado de Fontao y de recorrerse media España como topógrafo por motivos de trabajo. Santiago Ferreiro Rodríguez estudió ingeniería agrícola en Lugo, pero la vida lo ha llevado por otros derroteros profesionales. Empezó restaurando bicicletas para, después, dedicarse a la recuperación de motocicletas clásicas, su verdadera pasión. Ayer se hizo la tercera PCR en las más de dos semanas que lleva confinado después de dar positivo por Covid.
-¿Dónde se contagió?
-Me contagié en San Pedro de Alcántara, en la provincia extremeña de Cáceres, donde me encontraba por motivos profesionales. Yo trabajo en obras civiles en varios puntos de España y como ando siempre de un lado para otro supongo que es algo que tenía que pasar. Y eso que tenemos en la empresa todas las EPI y medidas posibles pero cuando estás yendo de restaurante en restaurante, pues tarde o temprano tenía que suceder. De hecho, como no tuvimos síntomas fue algo casual porque un compañero tenía síntomas y la propia empresa fue la que me pidió que me hiciera la prueba. Así que, la hice y di positivo en coronavirus, aunque no tenía contacto directo con ese compañero en cuestión.
-¿Cómo hace para que le realicen las PCR estando confinado?
-Estoy sorprendido de cómo funciona el sistema porque entiendo perfectamente que haya el número de contagios que hay, y que sea tan difícil de detener porque el sistema tiene muchísimas lagunas. Mi empresa por precaución me mandó hacer la prueba porque el protocolo dice que si tú estás en contacto directo con una persona que es positiva, te la tienes que hacer y estar obligatoriamente diez días de cuarentena, aunque te haya dado negativo. No fue mi caso y por lo tanto no estaba obligado a hacerla. La hice en Extremadura por mi cuenta y riesgo a través de la mutua y me dieron el resultado cuando ya llevaba tres días aislado en un hotel por decisión propia. Llamé al número de emergencias y me dijeron que no podía irme a Galicia. Les comenté que a partir de ese momento estaba de baja y comprobé que el sistema no está preparado para un trabajador que da positivo estando fuera de su tierra.
-¿Se volvió por su cuenta o le trajeron hasta Galicia desde ese punto de la provincia de Cáceres?
-Por supuesto. Como tengo coche de la empresa, lo que hice fue salir de Cáceres a las dos de la madrugada y llegué a mi casa en Donsión en torno a las nueve de la mañana. Cuando entré en Galicia llamé al mismo número de emergencias sanitarias y les dije que venía de Extremadura con este asunto.
-¿Le ha llamado algún rastreador durante todo este tiempo?
-Tengo que decir que con respecto a los rastreadores hasta ahora no me llamado nadie. Yo avisé por mi cuenta a personas con las que estuve hasta que me confiné. Algunos eran compañeros míos de los cuales alguno también se hizo la prueba y dio positivo porque, como te decía antes, coincidimos comiendo y cenando en restaurantes de San Pedro de Alcántara. Cuando llevaba 13 días me hice otra PCR y volvió a dar positivo y hasta hoy (por ayer), que es la primera vez que la hice por la Seguridad Social en Santiago. A mi me dieron la baja sin consultarme, solamente telefónicamente. La conclusión que saco de esto se resume con un ejemplo: Yo estoy en la época de matanza en mi casa y estoy trabajando fuera. Llamo a mi médico de cabecera para decirle que tengo síntomas de coronavirus. Automáticamente me da la baja tenga o no la enfermedad y la Seguridad Social no te manda hacer ninguna PCR. Las que hice hasta ahora las hice por mi mutua de forma privada. La Seguridad Social, hoy (por ayer), después de 20 días de baja es la primera vez que me hace una PCR porque yo le insistí al médico.
-¿Por qué se vio obligado a insistirle a su médico de cabecera en que tenía que hacerse la prueba?
-Yo necesito estar de alta, eso está claro. Llevo muchos días aquí metido y quiero volver a trabajar. La consulta es telefónica y el médico te da la baja o el alta dependiendo de lo que tú le digas que tienes. A no ser que seas una persona como por ejemplo un profesor, que por protocolo tiene que tener una PCR para poder incorporarse a sus clases, pero los trabajadores no necesitan ese requisito porque después de quince días te dan de alta.
-Si diera negativo la última PCR, ¿cuándo espera poder reincorporarse a su puesto de trabajo?
-Si así fuera, yo de manera particular puedo llamar a los médicos para solicitar el alta. Si no quiero, podría seguir con la baja varios días más. Pero es que fui yo el que tuve que insistirle al médico para hacerme la PCR porque en teoría ellos por protocolo al pasar catorce días te dan de alta si tú no tienes síntomas, como es mi caso. Sin embargo, cuando hice la serología todavía era contagioso y se lo dije al médico. Con esto quiero insistir en que todo depende de lo que le digas para que te den o no el alta. Eso no tiene lógica ninguna y así es imposible que no haya contagios porque si estás en una pequeña empresa donde a lo mejor te presionan por lo que sea, tú puedes estar con síntomas y decir que estás perfecto y que no te pasa nada.
-Tiene que ser duro estar tanto tiempo en casa asintomático.
-La verdad es que es curioso que después de casi 15 años viviendo fuera de Galicia vuelva a estar en la casa donde nací y me crié para estar confinado. Tengo que decir que esto que me pasa a mi no sé si sucede también en otras comunidades de España. Desde luego, a mi me sorprendió mucho todo esto.
-¿Qué le pareció la prueba que le efectuaron en el Gil Casares de Santiago de Compostela?
-La verdad es que tengo que reconocer que después de insistir me citaron y llegué allí en coche sin tener que bajarme para nada. Tardaron dos minutos en un montaje que tienen allí que está muy bien hecho. Ya digo que eso lo tienen muy bien montado pero que tengas que insistir para que te la hagan para que te den la baja o el alta porque si no te la dan sin ningún tipo de prueba, no tiene lógica para mi. Ahora espero dar negativo y volver a trabajar.
