Antonio Prieto y Jorge González vencieron ayer en el VII Rally de Regularidad Villa de Lalín a los mandos de su Mini 1275 GT. Segundos fueron Miky Caldas y Diego López, de la Escudería O Toxo, con un BMW 320 E21, por delante del Fiat Ritmo 130 TC de Juan Recimil y Alejandro Barrios, también de O Toxo. El primer clasificado sin contador fue el R5 de Luis Manuel y Miguel Iglesias, mientras que el primer equipo femenino fue el formado por las hermanas Alfaro con su Morris Mini MK2 de Vigo Clásicos. Últimos, y ganadores del premio de los relojes, fueron Luis Carlos Mella y Constantino Fernández con su Seat 1430 1600 de Condado-Paradanta.

La prueba de ayer volvió a tener un marcado carácter solidario en colaboración con la Asociación O Mencer de Lalín. Cada equipo aportó al menos diez kilos de alimentos no perecederos, productos de higiene personal y productos para bebés hasta reunir más de 600 kilos que serán distribuidos por esta organización solidaria lalinense entre las personas necesitadas. Entre los vehículos que se pudieron ver ayer por las carreteras dezanas se encontraron modelos de Porsche 911 SC, Alpine A110, Nissan 300Z, Mini 1275 GT, Lancia Beta Montecarlo o Ford Escort MKII Grupo 5, entre otras joyas de la automoción.

La principal novedad de este año fue que el parque cerrado para verificaciones administrativas y técnicas estuvo situado en la calle Areal. La prueba constó de 156 kilómetros con unos 132 cronometrados, saliendo desde la céntrica calle lalinense para volver de noche y compartir una cena de confraternidad que al cierre de esta edición no había comenzado. Los participantes circularon por los términos municipales de Silleda, Forcarei y A Estrada. La inscripción de este año se cerró con 60 equipos participantes, que supusieron la presencia de 136 personas, además de la veintena de integrantes de la Escudería O Toxo, que colaboraron en la organización del evento.