Vecinos de Taboada Vella, en la parroquia silledense de Taboada, se quejan de que el Concello no haya repuesto el alumbrado público en algunos puntos del lugar. Una de las afectadas, María Jesús Maceiras, alega que sí se han colocado farolas a otros residentes "que tienen luz pública en una casa con cierre, alumbrando su jardín", de tal modo que incluso "para cambiar la bombilla tienen que llamar y pedir permiso para entrar". Silleda apagó 960 luminarias del rural dentro de su plan de ahorro de 2012. Pero desde noviembre de 2014 volvió a encender la mayoría de farolas.