La Copa del Rey regresa al calendario granate un año y diez meses después de la última participación del Pontevedra en el torneo, con la eliminatoria de segunda ronda ante el Cádiz cayendo del lado del conjunto gaditano en los penaltis.
La escuadra que entrena Antonio Fernández tendrá ante sí al Manresa (domingo, 12.00 horas), equipo recién ascendido a Segunda Federación al que los granates ya se enfrentaron en una eliminatoria copera a doble partido en la temporada 1975-76. La ida se saldó con derrota del Pontevedra por 2-0, pero el equipo se rehizo dos semanas después en Pasarón, avanzando a la segunda ronda con un categórico 3-0.
Un torneo complejo
La historia reciente del Pontevedra en la Copa del Rey ha estado marcada por los altibajos desde que el cuadro lerezano ascendiese por última vez a Segunda División en la temporada 2004-05. Tras quedar eliminados en dieciseisavos ante el Getafe esa temporada, llegaron dos derrotas consecutivas –ante L’Hospitalet en la 2005-06 y Rayo Vallecano en la 2006-07– y la última gran aventura granate en el torneo del K.O., en el que lograron eliminar al Alcalá (1-5), al Cartagena (1-0) y al Puertollano (2-0) para plantarse en dieciseisavos de final ante un Zaragoza de los más potentes de su historia, obrando el milagro en la ida en Pasarón (1-0) pero cediendo en La Romareda (3-1).
Desde aquella jornada histórica y antes de volver a ganar en Copa, los granates encadenaron cinco eliminaciones por la vía rápida: ante el Oviedo (2-0) en la 2008-09; contra el Guadalajara (0-1) en la 2010-11; contra el Guijuelo (1-0) en la 2015-16; ante la Gimnástica Segoviana (2-0) en la 2017-18 y, finalmente, contra la UD Ibiza (0-2) en la 2019-20.
