Siete jornadas de liga y Antonio Fernández todavía no ha repetido once titular. Aunque el entrenador del Pontevedra ha demostrado que tiene clara su columna vertebral, con siete jugadores que han salido de inicio en todos los encuentros disputados hasta el momento –Álvaro Cortés, Ángel Bastos, David Soto, Churre, Álex González, Miguel Román y Yelko Pino–, el técnico granate parece también muy propenso a experimentar y realizar muchos cambios entre una jornada y otra y durante el transcurso de los propios partidos.
No tendría que ser algo negativo, pero sí que ha habido algunos encuentos en los que la mano del entrenador ha perjudicado más que favorecido al Pontevedra. Casos concretos como el del derbi contra el Deportivo de La Coruña en Riazor, en el que los granates iban ganando gracias a un gol de Brais Abelenda en el minuto 56 y que a partir del minuto 64, con los primeras sustituciones del míster, el equipo se fue desdibujando hasta acabar encajando el empate en una jugada aislada en el minuto 87.
Curiosamente, el pasado domingo sucedió algo similar, aunque con peor desenlace. El Pontevedra visitó a uno de los favoritos de la categoría, el Linares Deportivo, segundo clasificado y que había sumado cinco victorias y un empate en las seis primeras jornadas, además de acumular casi un año sin conocer la derrota en su estadio, Linarejos. El compromiso ya era muy difícil de por sí para un conjunto granate que todavía se está asentando en una categoría muy diferente a la Segunda Federación, pero Antonio sorprendió con un once diferente, con el debutante Luis Martínez incluido en una hasta el momento inédita defensa de cinco hombres y con Mario Ortiz apuntalando por delante en la medular junto a Miguel Román y, algo más adelantado, Yelko Pino.
El experimento funcionó a la perfección, con un Pontevedra sólido y compacto, que apenas sufrió ante un rival de gran entidad y que incluso se pudo adelantar en el marcador en la primera parte. Pero en el descanso llegaron los cambios y la consistencia se fue perdiendo. Luis Martínez, con molestias, fue sustituido por Alberto Rubio. El equipo ganó presencia ofensiva, pero también vulnerabilidad atrás, más aún cuando poco después Antonio retiró a Mario Ortiz y dio entrada al explosivo extremo Gueye.
Tras el ya clásico cambio de Rufo por Charles en la punta de ataque, en el minuto 77 dio la oportunidad de debutar a Álex Masogo, que sustituyó a Miguel Román. A partir de ahí, el centro del campo se debilitó notablemente y la consecuencia fue la llegada del 1-0 a favor del Linares en el minuto 87.
Media de 5 modificaciones
Con respecto al año pasado, el Pontevedra ha aumentado su media de cambios por partido. Mientras que la temporada 2021-2022 Ángel Rodríguez era más reacio a realizar sustituciones –llegando a recibir muchas críticas por hacer solo dos en la primera jornada–, este curso la tendencia es totalmente inversa: Antonio ha realizado cinco cambios en todos los partidos excepto en la jornada 2 en casa del San Sebastián de los Reyes (2-0), que hizo cuatro. Tras las críticas, Ángel Rodríguez aumentó sus sustituciones en las primeras jornadas, hasta una media de cuatro por encuentro.
Mal fuera de casa
El Pontevedra sigue dejando muy buenas sensaciones en cuanto a juego. Ante el Linares, la primera parte fue de gran consistencia defensiva, algo básico para ganar partidos, y la segunda fue de más creatividad en ataque y más ideas en la creación, pero en detrimento de la contundencia anterior, lo que acabó con la derrota final.
De momento, los granates han disputado cuatro encuentros a domicilio, sumando únicamente un punto, el del empate contra el Deportivo (1-1). Además de perder contra el Linares (1-0), también lo hicieron contra el San Sebastián de los Reyes (2-0) y contra el Mérida (2-0).
En zona peligrosa
La derrota del pasado domingo ha supuesto, además, que el Pontevedra haya caído hasta la zona de descenso en la clasificación del grupo 1, en la que es decimosexto con seis puntos, los mismos que el Celta B, que marca la salvación y al que se enfrentará el próximo sábado, a las 19.00 horas en Pasarón.
Las aspiraciones del actual Pontevedra no tienen nada que ver con las que tenía el año pasado, pero también es curioso que el equipo granate esté en la zona comprometida al igual que lo estaba justo hace un año. Con Ángel Rodríguez en Segunda RFEF, el equipo estuvo en zona de descenso entre las jornadas 4 y 6, saliendo de ésta tras conseguir encadenar cuatro victorias consecutivas.
