La “Rara, pero San Silvestre” clausura un mes de actividad física con un total de 1.019 participantes y más de 12.000 kilómetros completados. Esta prueba nació con la intención de mantener viva la ilusión de la San Silvestre, un evento clásico en la Navidad de los pontevedreses. El objetivo iba más allá porque también se buscaba que la gente hiciese un mínimo de actividad física.

Aunque estos registros están lejos de los 7.000 inscritos del año anterior, cuando se batió el récord de participación, este millar de participantes lo consideran positivo porque “si es real esos 1.000 participantes es una cifra muy buena porque hace siete u ocho años no pasaba casi del millar de participantes”, según comentó Víctor Riobó, uno de los directores técnicos del evento.

La “Rara, pero San Silvestre”, es una prueba que buscaba mezclar el físico con lo virtual para poder cumplir con las medidas sanitarias recomendadas. La parte física se consiguió con las diferentes actividades que se organizaron para mantener viva esta ilusión.

Se crearon diez recorridos recogidos en el “Metro Silvestre”, un mapa que señala rutas que mezclan el centro de la ciudad con zonas verdes y de los aledaños del municipio en los que se puede realizar actividad física.

Exposición

La Alameda de Pontevedra acoge los 37 años de la San Silvestre en una exposición en la que se mezclan fotografías y recortes de periódicos. Esta exhibición tuvo bastante éxito que, tal y como justificó Santi Ferrer se debe la que, según manifestó, “la forma de mantener presente el espíritu de la carrera es recordarla”.

El 31 de diciembre, como este año no se pudo realizar una salida normal, se organizó un pistoletazo de salida al que asistieron el primer ganador de la prueba, Estanislao Durán; el atleta con más victorias, Víctor Riobó y la ganadora del año pasado, Candela Sánchez; entre otras personalidades del Concello y del club.

Aunque la “Rara, pero San Silvestre” durara solo un mes, la exposición y los puntos de información de los circuitos se mantendrán hasta el 31 de enero, para que la gente pueda seguir disfrutando de ellos.

Además desde el Concello de Pontevedra se comprometen a que estas rutas del Metro Silvestre estén limpias para que la población pueda practicar actividad física de calidad.