Aún algo incrédulo después de haber sido elegido para jugar con la selección estadounidense el Mundial de Balonmano de Egipto, confiesa que nunca había imaginado llegar aquí. Algo que tampoco pudo imaginar su abuelo cuando emigró a Norteamérica a los 17 años en busca del trabajo que no lograba aquí.

Allí conoció a su abuela, estadounidense, y allí nació y creció también la madre de Chan hasta los nueve años. “Mi abuelo, que también tiene la nacionalidad estadounidense, comenzó a trabajar en la construcción”, comenta el cisneísta. Después de muchos años como albañil acabó siendo socio de una gran empresa constructora y sus vidas siempre han estado ligadas al otro continente.

“La primera vez que fui a Estados Unidos tenía dos años y gran parte de mis veranos desde entonces los he pasado allí"

Álex Chan

“La primera vez que fui a Estados Unidos tenía dos años y gran parte de mis veranos desde entonces los he pasado allí, normalmente iba por un mes para estar con la familia y visitar a mi abuela y a mi tío. Tengo bastantes primos y familia allí”, comenta Chan, cuya familia reside en Virginia, emocionado por esta gran noticia.

Álex Chan ya estuvo en la primera preselección de más de 30 deportistas hace unos días. Aún así no las tenía todas consigo hasta hoy. “Al final nunca sabes porque es una decisión del entrenador y cuerpo técnico, pero sí que había posibilidades”, reconoce.

El seleccionador estadounidense Robert Hedin conoció a Chan hace apenas mes y medio. “A raíz de que Estados Unidos recibiera la invitación para el mundial me puse en contacto con mi entrenador, que a su vez habló con el técnico Manolo Cadenas que contacta con el entrenador estadounidense. Hablamos, me preguntó si tenía interés en ir allí, le dije que sí, mostró interés en convocarme y así comenzó todo”, resume el cisneísta.

El Mundial de Balonmano se disputará en Egipto entre el 14 y el 31 de enero y, como corrobora Chan, no afectará a la competición del Cisne, ya que coincide con el parón de Asobal, del 12 de diciembre al 13 de febrero.

Un deporte minoritario en EE UU

Álex Chan, que tiene la nacionalidad desde los 16 años, reconoce que su familia está muy orgullosa de poder representar a Estados Unidos, un país donde el balonmano actualmente es un deporte minoritario.

“Conocen el balonmano a través de mí. Mi familia sabe de él y en qué consiste por donde estoy yo y a lo que me dedico. Ahora supongo que lo seguirán más de cerca”, explica el pontevedrés.

“Es algo que nunca me habría imaginado, va a ser una experiencia para recordar toda la vida. Quiero disfrutarlo, intentar hacer un buen papel y dar lo máximo de mí”

Álex Chan

“Es algo que nunca me habría imaginado, va a ser una experiencia para recordar toda la vida. Quiero disfrutarlo, intentar hacer un buen papel y dar lo máximo de mí”, asegura Álex Chan, al que se le une la alegría de ir al Mundial de Egipto con Estados Unidos con la victoria cosechada por el Cisne el pasado sábado.

Ahora, el jugador del Dicsa Modular Cisne espera las instrucciones de la selección americana. “Aún nos tienen que aclarar dónde nos vamos a reunir, parece ser que habrá una concentración previa en Europa, pero aún no está nada claro. Supongo que ahora irá todo más rodado”, concluye.