El Pontevedra continúa trabajando en la búsqueda del entrenador que relevará definitivamente a Luismi Areda en el banquillo, pero las conversaciones con los técnicos que más gustan en la casa granate avanzan muy despacio principalmente por las diferencias económicas entre lo que ofrece el club y las pretensiones de los profesionales.
El mejor situado para sentarse en el banquillo de Pasarón sigue siendo Carlos Pouso. La dirección deportiva granate se ha puesto en contacto con el entrenador vasco, con el que negocia desde el domingo, pero ninguna de las dos partes parece tener prisa por cristalizar un acuerdo.
Por ahora, el Pontevedra parece que va a optar por dar un poco más de margen a Jesús Ramos, que salvo sorpresa será quien dirija al equipo el próximo domingo, en el partido contra el Melilla en Pasarón (12.00 horas).
El entrenador interino, con la victoria del pasado sábado ante el Celta B en Vigo (1-2), especialmente por las buenas sensaciones que dio el equipo en la segunda parte y por lograr una remontada a domicilio, algo que no se lograba desde diciembre de 2015, está opositando firmemente a continuar en el cargo. Además, siendo un hombre de la casa y muy valorado por su trabajo como coordinador de la cantera, no es de extrañar que desde el club apuesten por darle una oportunidad.
Eso no quiere decir que el Pontevedra haya roto conversaciones con los técnicos que le interesan. Además de Pouso, entre los favoritos están Antonio Fernández y Pichi Lucas.
