"Que no os queme el balón" fue, de forma muy resumida, el mensaje que envió ayer Luismi a sus futbolistas durante el entrenamiento celebrado en Pasarón. El técnico del Pontevedra insistió en que el equipo tuviese calma con la pelota y no se desesperase a la hora de organizar el juego ofensivo, que no arriesgase en los pases y que creciera en el partido a partir de tener la posesión de la pelota y de dominar al rival.

El míster vigués corrigió a sus futbolistas y les pidió, sobre todo, que tuvieran calma y tranquilidad para elaborar jugadas de ataque. Luismi quiere evitar que el equipo abuse de los envíos en largo, como sucedió en el tramo final del partido del pasado domingo contra el Atlético Baleares (1-2), pues eso provoca demasiadas pérdidas de balón y da alas al rival a la contra.

El entrenador del Pontevedra también hizo especial hincapié en el repliegue defensivo y en estar bien colocados en el campo para evitar que el contrario encuentre espacios con facilidad y llegue a la portería defendida por Edu Sousa. En este sentido, Luismi se centró en corregir los errores que advirtió con respecto al último partido del Pontevedra a domicilio, contra el Ibiza (2-1), en el que el equipo defendió demasiado atrás en la primera parte y, por lo tanto, apenas tuvo presencia en campo contrario ni generó ocasiones de peligro, pues la conexión entre líneas era casi inexistente; en la segunda parte se ajustó la línea defensiva y los granates se acercaron con más peligro al área rival.

Entre otras cosas, Luismi insistió en la velocidad en el desplazamiento de balón. Quiere que sus futbolistas obliguen al rival a desgastarse físicamente, pero sin correr demasiados riesgos, sobre todo en campo propio. El juego por banda y los desmarques ofensivos fueron otros de los aspectos que recalcó en la sesión celebrada ayer en Pasarón, no solo durante los propios ejercicios del entrenamiento, sino también después, en una pequeña charla que dio durante los estiramientos.

Partido clave

El técnico granate es consciente de la importancia del encuentro del domingo contra el Oviedo B (12.00 horas). No solo el resultado de este partido podría ser determinante para el futuro del Pontevedra esta temporada, sino también las sensaciones que deje el equipo sobre el césped.

En este sentido, Luismi también quiere evitar que sus jugadores se frustren por fallar demasiadas ocasiones de gol, algo que se está convirtiendo en una característica del equipo esta temporada. Así, en el entrenamiento de ayer hizo hincapié en la constancia, destacando que lo importante es crear peligro para, a partir de ahí, hacer daño al rival y adelantarse en el marcador, pero también insistió en que los futbolistas finalizaran las jugadas de la sesión de ayer marcando gol, algo que lograron en un alto porcentaje de los remates que hicieron a portería.