El mundo del deporte no es ajeno a las reivindicaciones por el Día Internacional de la Mujer y la primera plantilla del Poio Pescamar, al igual que sucedió el año pasado, participará en la huelga. El club rojillo es, junto al Burela, uno de los dos únicos equipos profesionales del fútbol sala femenino, de ahí que la entidad poiense quiera aprovechar esta fecha tan señalada para mostrar su apoyo a las futbolistas del resto de clubes que todavía no se han profesionalizado y para pedir que se mejoren las condiciones en este deporte.
Las ocho jugadoras que forman parte del primer equipo del Poio Pescamar son profesionales, un dato que resulta llamativo si se compara, por ejemplo, con la selección española absoluta, que recientemente se proclamó campeona de Europa, en la que solo había cuatro futbolistas profesionales, entre ellas la portera rojilla Silvia Aguete (que acaba de ser preseleccionada para el X Torneo Internacional que se celebrará el 9 de mayo en Moscú).
Además de equiparar el deporte femenino con el masculino, el Poio Pescamar confía en que en un futuro próximo el fútbol sala esté al mismo nivel que otros deportes y que eso también se vea reflejado en las ayudas y subvenciones públicas.
Las futbolistas del Poio cuentan con el apoyo del club, empezando por su presidente, Juanjo García. "Estamos todas y todos de acuerdo en hacer huelga", apunta la jugadora Ale de Paz.
Visita del Móstoles
Aunque la de mañana será una jornada de reivindicación, el Poio Pescamar continúa trabajando para preparar el partido del sábado contra el Móstoles (pabellón de A Seca, 18.30 horas), en el que intentará resarcirse de la derrota sufrida el pasado domingo en su visita al Sala Zaragoza (2-1). "Fuera de casa parece que nos cuesta un poco arrancar, los rivales también se hacen más fuertes en sus pistas, cambian la actitud, tienen más intensidad y la afición los arropa", comenta De Paz.
La cierre destaca las buenas sensaciones como locales. "Estamos jugando bien, los goles llegan de jugada elaborada, no es que sean de suerte, y es el reflejo de lo que llevamos entrenando desde agosto", apunta la futbolista, que en este sentido recalca la adaptación al sistema de Dani Díaz. "Estamos jugando a lo que él pide y ya tenemos nuestro sistema de juego y nuestra identidad".
Sobre el Móstoles, De Paz señala que "sabe muy bien a lo que juega, tiene jugadoras muy buenas y muy veteranas, también gente joven que corre y creo que va a ser un partido difícil y reñido. Intentaremos aprovechar la ventaja de jugar en casa y la clave estará en no encajar y en jugar en equipo, todas a lo mismo".
