Joan Antoni Celdrán Montoya es el único portero vivo de aquel legendario Pontevedra del "hai que roelo". Actualmente reside en su Cataluña natal, en Barcelona (Celdrán defendió la portería de los culés entre 1959 y 1963), y regresó a Pontevedra para participar en los actos de este 75 aniversario, animado por su hijo, nacido en la ciudad del Lérez. Ayer, tras muchos años sin visitar al ciudad, observaba emocionado el nuevo Pasarón antes de efectuar el saque de honor junto a Cholo y Calleja.

- ¿Cómo se siente?

- Muy emocionado realmente. Muchísimo, porque son unos recuerdos inolvidables y la verdad es que afloran los nervios.

- Se encuentra usted ante un Pasarón bien distinto a aquel en el que defendió usted la camiseta del Pontevedra...

-Sí, pero está maravilloso, quedó precioso. Se nota la diferencia.

- Pero aquel antiguo Pasarón también tenía algo especial, ¿no es así?

- Especial no, aquel Pasarón era especialísimo. Aquí hemos batido a los grandes, hemos luchado mucho sobre este campo y eso es maravilloso.

- Se vivieron momentos de gloria sobre este mismo césped sobre el que está usted ahora...

- Muchísimos. Y yo los recuerdo con mucho entusiasmo e interés pero de verdad creo que el Pontevedra volverá a ser grande y revivirá estos mismos recuerdos en el futuro.

- ¿Hacía mucho tiempo que no visitaba Pontevedra?

- Pues hacía unos diez o veinte años. Y he venido también animado por mi hijo, que es gallego nacido en Pontevedra y le hacía a él tanta ilusión como a mí. Me siento muy emocionado.