La plantilla pontevedresa acudió ayer al Estadio de Pasarón para realizar una sesión de recuperación tras el esfuerzo realizado el día anterior ante el Puertollano. Más que nada fue un entrenamiento de relajación, sobre todo para los titulares, pues no hay que olvidar el fuerte calor que tuvieron que soportar, a pesar de que el choque se jugó a las 20.00 horas.

En un principio, Manu Fernández no tendrá problemas para el desplazamiento a tierras manchegas, ya que todos los jugadores acabaron el partido sin molestias, aunque unos más cansados que otros.

La intención del entrenador pontevedrés es realizar los entrenamientos a la misma hora que se jugará el partido con el fin de adaptarse a las alturas temperaturas que se esperan el domingo en la ciudad manchega.

Lo más posible es que todos los entrenamientos se celebren en Pasarón debido a que tanto como asciendan como no, no volverán a utilizarlo hasta la próxima temporada, lo que sin duda será beneficioso para mantenerlo en las buenas condiciones en las que está en estos momentos.

La intención del consejo de administración es concederle ya las vacaciones a los jugadores con el fin de que lleguen a la pretemporada en las mejores condiciones para afrontar los amistosos.