Comenzó la temporada de la Liga LEB Plata y el COB lo hizo en el Pazo ante una afición que, a pesar del descenso, respondió y responderá a lo largo de la temporada.

El primer cuarto comenzó igualado pero duró poco la equidad. Abrió marcador con una gran canasta el hombre que ya apuntaba maneras en pretemporada: Greg Gantt, con él y con Javi Marín desde la dirección, el COB se movía, jugaba y anotaba pero no parecía suficiente para abrir brecha en el electrónico, hasta que la hubo y sin vuelta atrás.

El conjunto local encontró espacios, abrió un parcial de siete a cero con canastas de Javi Marín, Greg Gantt y Ferran Ventura que daban la primera ventaja amplia en el marcador (15-6), pero el MSC Enrique Soler no bajaba los brazos, 15-10 y primer tiempo muerto de la cita para poner orden por parte de Armando Gómez. Un éxito. Diez puntos consecutivos de un COB que obligaba a que los visitantes pidiesen su parada. A ellos no les funcionó: fin de cuarto 25-12.

El segundo cuarto fue el momento estelar para la anotación. Comenzó con un recién llegado Dagur Jónsson asumiendo galones impulsando al equipo a una mayor renta, un más diecinueve que obligaba de nuevo, a que los norteafricanos a parar el partido (33-14). Pero la ventaja no se quedó ahí, siguió creciendo gracias a un Ferran Ventura en racha y también ayudado por unos malos momentos de un Enrique Soler que no cesaba en el empeño pero no encontraba camino al aro, (38-14). Reaccionaron en ese momento los de Javier Nieto, se acercaron a quince sustentados en Prgomet, pero se llegaba al ecuador con un claro dominador: 46-29.

La segunda parte comenzó con la tónica de la primera; con Ourense anotando desde la distancia con Ventura que seguía de dulce y con Greg Gantt sumando diez puntos en poco más de un minuto para que el luminoso reflejase veinticinco de diferencia, la máxima renta del encuentro, con quince minutos de disputarse (62-37). La ventaja se mantuvo rondando los veinte para el COB a pesar de los envites de un Melilla que no iba a tirar la toalla y entregar el partido por lo que apretaba y buscaba las faltas sin tener éxito con su objetivo,71-48.

El último cuarto denotaba el cansancio de los ourensanos que peleaban por mantener la alta intensidad del partido, tuvo así parciales para ambos bandos. Si Prgomet y Orrit anotaban, Marín y Lasenbergs respondían (76-59). El partido, por la diferencia, se fue apagando en cuanto a emoción, pero no en intensidad. El acierto en los triples del COB fue clave a lo largo de la prueba y tres consecutivos de Gantt, del Águila y Javi Marín lo fueron para la sentencia, volvían a llevar el marcador por encima de los veinte y fin del encuentro: 91-74.