El COB hace las maletas y se dirige mañana a Murcia donde disputará el segundo encuentro de la segunda fase de la Liga LEB Oro. 

 El equipo de Gonzalo García de Vitoria lleva consigo la victoria obtenida en el Paco Paz frente al Lleida con un balance positivo, tras mucho pelear consiguieron el resultado que esperaban, una prórroga de cinco minutos les sirvió para ponerse por delante y conseguir un triunfo necesario.

Con ese balón de oxigeno, hay un mayor optimismo en el club de cara a la pelea por la supervivencia en una competición que, con el formato actual, no perdona, tiene menos ascensos a la ACB, pero más descensos a la LEB Plata, el 40% de los equipos.

Al encuentro de mañana en el Príncipe de Asturias a las 19.00 horas, mientras que los ourensanos llegan con un golpe de moral , los locales se medirán con el equipaje contrario. En el primer partido de esta fase los de Murcia han sufrido una derrota ante el Cáceres, que si bien una no dice mucho, la suma de las cinco que ya llevan sí, teniendo dos partidos menos por jugar que el COB, se sitúan en los puestos de descenso.

El reto de los ourensanos está, aún así, por partida doble, además de enfrentarse mañana a Murcia sin tiempo para descansar tendrán que hacer de nuevo las maletas, a pesar de que en un principio eran para Girona finalmente serán para Ourense.

El club recupera el partido aplazado de la primera jornada frente al Lleida el 31 de marzo en el Fontajau y , para evitarse el largo desplazamiento dos veces en tan poco tiempo, la idea inicial era salir de Murcia dirección Cataluña e instalarse tres días en Valencia para poder descansar y entrenar, pero no será así.

Para poder hacerlo tendrían que volver a realizar PCR y han decidido que, como el riesgo de dar positivo siempre está presente, 10 días (en caso de ser positivo) de confinamiento todo el equipo en el hotel sería demasiado gasto para el club, así que, carretera, manta y poco descanso en la lucha por el triunfo.

En duda el encuentro con Huesca

El coronavirus tampoco da descanso a los deportistas de élite. En una temporada de baloncesto que ha sido arrancar y frenar demasiadas veces, ahora es el Huesca el que pone en la cuerda floja el encuentro frente al COB. Los oscenses anunciaron esta semana que cuentan con dos positivos en la plantilla y tres pruebas no concluyentes y que, por tanto, queda el equipo confinado. Tanto jugadores como cuerpo técnico estarán 10 días aislados y después deberán someterse de nuevo a las pruebas para saber si dan negativo y pueden regresar a la competición. De momento afecta directamente al partido que tenían que jugar frente a Cáceres que ya ha sido aplazado, pero está en duda y en peligro el regreso del Ibereólica Renovables Ourense al Pazo de Deportes Paco Paz porque precisamente sería en el encuentro ante el Huesca el próximo 4 de abril. Hasta la fecha parece que debería poder jugarse pero hasta la semana del 1 de abril no se sabrá con total certeza, a la espera de los resultados del conjunto de Huesca y de la decisión de la Federación Española de Baloncesto.