Las expectativas estaban altas en el derbi entre el líder de la tabla, el Arenteiro, y la Unión Deportiva Ourense, que pelea por abandonar los puestos de descenso.

Una primera mitad que, para ser un derbi, transcurrió lenta, sin ritmo, sin energía, baja de intensidad y con una Unión Deportiva Ourense que no se esforzaba por ocasionar ningún tipo de peligro ante el líder de la clasificación, sino por defender su área. Con los de Fernando Currás replegados, toda la acción estuvo en el campo de los de Ourense, que buscaban no cometer los errores defensivos con los que habían caído en Arousa.

Por su parte, los de Fran Justo tenían toda la comodidad, pero no grandes ocasiones de gol. La primera oportunidad del encuentro estuvo en el minuto 9, en el pie de Víctor Eimil, quien lleva tres jornadas seguidas como goleador, y junto con Sylla es uno de los anotadores del equipo. No tuvo suerte.

Más intercambios, mucho toque de balón y mucho pase interno, pero sin ocasionar peligro hasta el minuto 17. Aunque el peligro no fue para los guardametas sino para el delantero de la Unión Deportiva Ourense, Amin, a quien una falta involuntaria por parte de uno de los jugadores del Arenteiro obligaba a pedir la asistencia médica, parando el juego sin saber si se recuperaría o tendría que salir del campo. Lo intentó el delantero tinerfeño, pero cuatro minutos más tarde solicitaba, con enfado, el cambio y no se reincorporaba a un equipo que perdía a su jugador más importante en la faceta ofensiva.

Aumentó la presión la UD Ourense buscando solventar la falta de Amin, encontrando su primera oportunidad de gol en el minuto 32, pero sin obtener acierto. Minutos más tarde, primera polémica en un partido que fue bronco entre ambos equipos. Una falta cometida sobre Carlos de Dios, mientras se aproximaba la portería de Diego García, se saldaba sin sanción y también sin lesión grave. De Dios continuó en el campo, no así Tiago, que cinco minutos más tarde, aquejado de un golpe recibido en la rodilla, pedía salir del campo.

Tres minutos estuvieron jugando los de Currás con 10 hombres, hasta que en la prolongación entró Champi en sustitución de Tiago. Minutos que no dieron para grandes jugadas pero si para una expulsión directa. Tarjeta roja para el fisio de la Unión Deportiva Ourense.

La segunda mitad tuvo menos lesiones, pero las mismas broncas entre jugadores y entre los equipos de ambos clubes.

El Arenteiro era consciente de que un empate lo alejaba de ser el segundo equipo con pase directo al ascenso, y lo aproximaba al Arosa. Un saque de esquina, de los pocos balones parados que hubo en el partido y en los cuales tiene gran acierto el Arenteiro, los sacaba de esta situación. 1-0 a favor de los locales. Triunfo polémico del derbi. Con tantos hombres en el área pequeña, era difícil identificar qué había sucedido. Mientras los jugadores del Arenteiro celebraban el gol, los de la UD pedían falta por considerar que la patada de Eimil era peligrosa para su portero, Dani Sampayo.