Hay empates dulces y empates amargos. El de la UD Ourense en el campo de Santa Mariña fue especialmente desgraciado. Entraba el partido en los minutos de prolongación y los rojillos no ya sólo mantenían la victoria, es que se habían cansado de desaprovechar ocasiones para sentenciar. Se cumplió la máxima, 'el que perdona lo termina pagando'. Tópico o no, en el minuto 92 empató el Choco con un gol de Alberto Suárez.

Mucho tiempo van a estar Pedrosa y Champi maldiciendo los últimos minutos del partido en territorio redondelano. Se jugaba el minuto 77 cuando Tiago robó un balón en la salida del Choco y se la cedió al lucense, solísimo. Empaló mal, lejos del poste. En el 85, Pedrosa se resarció del error dejando a Champi ante el portero. Lo que intentó sólo lo sabe él, lo que salió fue un globito defectuoso que no cogió altura y tampoco puerta.

Mandaba por aquel entonces la UD Ourense desde que Tiago, en el minuto 41, irrumpió en el área pontevedresa y batió a Cortegoso con un disparo que pegó en un palo y casi en el otro.

Pocos agobios pasaron los ourensanos, tampoco en la segunda parte, en la que el Choco manejó y manejó pero tampoco puso en apuros serios a Ángel Díez.

Con Arce ocupando el lateral derecho y Josu de nuevo en el centro, con Viti en medio campo -cayó del equipo Manu Blanco-, la UD Ourense aceptó el juego vertiginoso de los primeros minutos.

Poco a poco se fue serenando el juego. Cuando no pasaba nada apareció Tiago para encarar a un defensa, salir de él y del que apareció para cortar y marcar.

La primera media hora del segundo tiempo fue del Choco, que acosó y acosó pero tampoco pegó. Enfrente, los rojillos esperaban el momento de matar a la contra. Entró Carlos primero y Pedrosa después, más tarde Germán.

Cuando el 0-1 parecía inamovible, Alfredo se vio solo ante un atacante, Champi no bajó a ayudar y por ahí ganó la línea de fondo el Choco. El centro raso al punto de penalti impidió la victoria rojilla.