En cosa de un mes tendrá nueva casa para la base y los entrenamientos del primer equipo la UD Ourense, el campo de Vilar de Astrés, en el que ayer estuvo el presidente de la Federación gallega, Rafael Louzán, acompañado del vicepresidente José Manuel Fernández y del delegado en Ourense, Raúl Rois. Por parte del concello -el campo es municipal-, Mario Guede.

Las obras que se están llevando a cabo consisten en concreto en el acondicionamiento de los vestuarios así como la construcción de una grada cubierta de cuatro alturas y de la humanización de la parcela en la que se emplazará el campo, además por supuesto de la instalación de césped, artificial.

Las obras, financiadas íntegramente con los presupuestos del consello municipal de deportes, tienen un coste cercano al medio millón de euros, con una garantía de equipamiento de cuatro años. Evolucionan a buen ritmo y se espera que estén finalizadas en marzo.

"La obra va a quedar bien, lo gordo ya está hecho, va a ser un muy buen campo para el fin que se persigue, de manera que puedan estar trabajando cuatro equipos a la vez", resumió Mario Guede.

De momento, el nuevo campo acogerá un campeonato nacional de selecciones sub14 y sub16.