La próxima temporada, el grupo gallego de la Tercera división podría tener 21 equipos. Y todo porque una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia le ha devuelto al Estudiantil tres puntos de un partido que había perdido.
Todo se remonta a casi tres años atrás, cuando el Estudiantil recurrió una derrota contra el Arzúa por alineación indebida de un futbolista rival. El 28 de septiembre de 2016, el comité de apelación de la Federación gallega le dio la razón, tres puntos que le habrían dado el título en el grupo norte de la Preferente autonómica, y con ellos el ascenso a Tercera. Sin ellos, el equipo pontevedrés acabó tercero, disputó la promoción pero no subió.
La sentencia del TSXG puede ser recurrida ante el Supremo en un plazo de un mes. Tenso periodo de espera pues.
