Iñaki Williams espera poder despedir a estos "tres grandes amigos" -en referencia a Susaeta,Rico e Iturraspe- con una victoria mañana frente al Celta que le acercaría a una séptima plaza con billete a Europa.

"Conseguir ese premio sería más especial con lo que nos ha costado llegar hasta aquí. Hemos salido adelante, peleado por Europa y tenemos la sartén por el mango. Tenemos que salir a agarrar lo que queremos", reflexionó ayer Williams en Lezama.

El delantero apeló a la fortaleza del equipo rojiblanco en San Mamés, donde "no hemos perdido en todo 2019", aunque reconoció que van a necesitar mejorar su entrada a los partidos respecto a los dos últimos contra el Alavés y el Valladolid.

"Somos humanos y es complicado salir todos los partidos con la máxima mentalidad. En esos dos quizás los primeros veinte minutos no fueron buenos, pero no queda tiempo para lamentarse. Debemos salir desde el minuto uno con la actitud que nos ha hecho salir de abajo", dijo.

"La temporada se ha hecho muy larga. La presión que hemos tenido hace que todo cueste más, pero físicamente estamos muy bien. Es el último sprint y hay que apretar y salir con todo", reiteró antes de abordar el adiós de tres compañeros que causarán baja en el Athletic al concluir el curso.

De Susaeta, Williams subrayó que el capitán ha sido "siempre un referente" y un "grandísimo compañero. Me intentó ayudar desde que llegué. Cuando debuté, el míster (Valverde) me puso en su posición y siempre me ayudó. Le estoy muy agradecido. Me hubise gustado compartir muchos más años con él como capitán. Nos da pena que se marche", confesó. El ariete también tuvo palabras de reconocimiento para Iturraspe y Mikel Rico. "Iturraspe, digan lo que digan, es un pedazo de crack que ha demostrado estar a un nivel altísimo. Ha sido internacional y nadie le ha regalado nada. Y Rico ha sido también una grandísima persona y como un padre para mí. Me da pena que se vayan", incidió.