Diego Vieytes vivió desde fuera la última derrota de la UD Ourense, en Arousa. Una sanción por acumulación de amarillas lo sacó de la alineación. Ahora vuelve al centro de la defensa para recibir al primer clasificado. "Tenemos más que ganar que que perder", adelanta.
¿Qué está pasando? "Los que llevamos tiempo en esto del fútbol sabíamos que una mala racha iba a llegar tarde o temprano. Ha llegado, lo que pasa es que ha tardado mucho y ha venido de golpe, cuatro partidos seguidos. No digo que tengamos que quitarle importancia, pero sí que debemos valorarlo en su justa medida. Estas derrotas nos han comprometido el objetivo que nos marcamos en navidades. Nos lo han comprometido pero sigue estando muy vivo. Debemos estar tranquilos, si lleváramos estos mismos 49 puntos llevando otra dinámica seguro que todos estaríamos muy felices. Es eso, se han juntado todas las derrotas de golpe y eso ha hecho que los ánimos de la gente que está fuera se hayan enfriado un poco. Los de fuera, porque el vestuario está muy tranquilo", detalla Vieytes.
Compostela, Arosa... Todavía quedan Ferrol y Bergantiños... "Nada, lo que nos ha hecho daño ha sido perder contra Silva y Paiosaco, son dos partidos que no contábamos acabarlos sin sumar. Sabíamos que en eso que se ha venido a llamar Tourmalet podíamos perder puntos, las cuentas se nos han descabalgado un poco con las otras dos. No lo hicimos tan mal como para perder 0-2 y 3-0. Pero lo pasado pasado está, no es tiempo de darle vueltas", remarca.
Una competición difícil
Los números del Ferrol en los últimos partidos tampoco son para enmarcar... "Es un claro ejemplo de lo difícil que es la competición, el presupuesto que maneja es para estar en la zona media alta en la Segunda B. Y nosotros venimos de donde venimos. No nos mete miedo, ojalá todos los partidos fuesen contra el Ferrol, la motivación es máxima. Va a haber mucha gente, todo el mundo va a estar pendiente de este partido. Nos jugamos mucho, aunque sabiendo que si ganamos no nos metemos en el play off y si perdemos tampoco nos quedamos fuera", subraya el ourensano.
¿Se perciben igual los partidos estando en el campo o fuera? "En Arousa, la dinámica fue la de los últimos partidos, el equipo salió bien pero es una evidencia que le cuesta generar arriba. Y atrás hemos perdido la solidez que teníamos hace un mes y medio. Antes igual teníamos una capacidad de reacción que no estamos teniendo ahora. Esta mala dinámica hace que se hagan más grandes las cosas malas. Ahora se trata de alargar los momentos buenos", responde.
¿El vestuario se come la cabeza? "Para nada, el ambiente es bueno, apelamos a la tranquilidad. A todos nos molesta perder, pero un grupo más involucrado que éste no lo hay, no se encuentra. Somos los primeros que queremos cambiar esto. La unión entre equipo y aficionados no la tienen Ferrol y Compostela, es una baza que tenemos que exprimir. Cada partido que pasa estamos más cerca de ganar, contra el Ferrol tenemos más que ganar que que perder", recalca.
"Hemos de seguir como empezamos, el año pasado también lo pasamos mal. Desde el primer partido nos dijimos que teníamos que disfrutar, que la Tercera división era un premio para todos nosotros. La prueba es que hasta esta mala raha estábamos entre los tres primeros y con mucha ventaja sobre el quinto. Queda mucho todavía, saldremos de ésta", finaliza el central de la UD Ourense.
