A la Unión Deportiva Ourense le pueden quedar menos de dos meses en las ligas provinciales si se mantiene el ritmo de puntuación, un momento idóneo, desde el punto de vista de su exjugador y colaborador Ramón Dacosta para calcular el nuevo rumbo.
- ¿Qué opinión le merece la temporada de la UD Ourense?
- El equipo ha conseguido hasta ahora los puntos suficientes para cumplir el objetivo del ascenso a Preferente. Dentro del cómputo general, hay que felicitar a los futbolistas y al cuerpo técnico. Queda un pequeño tramo, la recta final, y por los puntos de ventaja sobre el tercero se puede conseguir que sea antes del 14 de mayo, pero como estamos viendo, cuesta mucho ganar cada partido.
- La brecha en la clasificación no refleja las dificultades con que se están sumando los puntos.
- Hay que ser cautos y no ponernos la venda en los ojos: sacarle 11 puntos al tercero dice mucho de lo cerca que está el objetivo pero, siempre desde la humildad, hay que jugar al 100 % cada partido y ojalá podamos conseguirlo en abril y no esperar a mayo. En Allariz, por ejemplo, pudimos ver que fue un partido de tú a tú que perdimos 3-2. En las últimas jornadas se ha ganado 1-0 o 2-1 y esa es la realidad. Hay que tener los pies en el suelo, seguir trabajando como hasta ahora hemos hecho y, una vez que se consiga, felicitar a los futbolistas y al cuerpo técnico.
- ¿Han empezado con la planificación de la próxima temporada?
- Primero tiene que quedar claro qué es lo que pretende el club para el año que viene y, aunque sí es verdad que se trabaja a nivel de directiva para planificar la temporada, hay ciertos puntos importantes que están en el aire y que tienen que quedar claros para ponerse en funcionamiento y hablar con la gente para venderle lo que se quiere para el próximo año. Pero siempre con los pies en el suelo, insisto, con el objetivo de que este equipo esté pronto en Preferente.
- ¿Ve a la UD Ourense preparada para el salto?
- Venimos de tres años que han sido maravillosos, con una importancia enorme para el crecimiento del club. Tres años en el fútbol provincial, en el fútbol más modesto, jugando en nuestro entorno. Cuando se empezó, sabíamos a dónde queríamos llegar y que se trataba de un camino a medio plazo, pero que había que llegar pronto. Estamos en ello, pero el propio club, si no estamos vivo, nos come.
- Hasta ahora se han ido sorteando todos los obstáculos que surgieron en el camino.
- Hasta ahora ha sido todo encantador. El comienzo, no perder ni un partido en Tercera Autonómica, ganar la liga y la Copa Diputación el segundo año y, ya en Primera, estar en puestos de ascenso todo el año, luchando además por el título, y en cuartos de final de la Copa después de eliminar al campeón. Todo es de sobresaliente, pero tenemos que ir por delante porque para el año que viene, si estamos en Preferente, ya es otra historia, necesitamos más cosas.
-¿Qué considera que es imprescindible cambiar?
- Hay vicios adquiridos. La gente en la grada está acostumbrada en estos años a ganar por resultados amplios. No ha visto muchos partidos con resultados apretados. Los propios futbolistas están acostumbrados a ganar siempre y mantener esa intensidad, ese vivir el partido, es complicado. Por el contrario, los demás equipos tienen una motivación máxima. Hablando con compañeros que están en otros clubes, te dicen que los fines de semana que juegan contra el Ourense se cuidan más porque jugar contra el Ourense es algo diferente. Todo eso nos crea unos vicios que hay que cambiar.
- ¿Habrá el consenso necesario en el club para abordar esa transformación?
- Lo que se haga, los que tomen las decisiones, tienen que hacerlo dentro del proyecto. Yo personalmente pienso que hay que cambiar ciertas cosas, ciertos hábitos, para dar un paso que nos permita ir por delante antes de que nos coma la Preferente. Y, sobre todo, pensando que a este equipo hay que meterlo, a no mucho tardar, en la Tercera División.
- Mayor exigencia implica mayor gasto y, por lo tanto, un incremento en el apoyo económico con que cuenta la UD Ourense. ¿Está el club capacitado para captarlo y la ciudad para darlo?
- Necesitamos ese cambio para que el equipo sea capaz de hacer que la afición siga creyendo en el proyecto y para que atraiga al propio empresario que pone publicidad. Que se vean unos nuevos fundamentos en el propio equipo de jugadores, en el cuerpo técnico y hasta en la directiva. Hay que dar ese paso adelante para no salirnos del objetivo primero.
- ¿En ese camino seguirá siendo primordial contar con jugadores de Ourense?
- Tenemos a muchos jugadores ourensanos dispersados tanto en Tercera como en Preferente y se puede hacer un equipo ourensano. O, si no es ourensano, con jugadores que no sean muy lejanos a nuestra provincia. Si, por lo que sea, uno o dos futbolistas pueden marcar la diferencia, o si se cree que son muy importantes para el equipo y para el objetivo de llevarlo a Tercera, por supuesto que hay que traerlos.
- Sean de donde sean, la inversión para hacer un plantel con aspiraciones ante rivales ourensanos y de Pontevedra se multiplicará.
- Todo va en proporción. Sí es verdad que este año hemos perdido a jugadores por el tema económico, porque en cada categoría hay un precio. Lo que no se va a hacer es pagar cantidades desorbitadas cuando en Tercera División, sabiéndolo a ciencia cierta, hay jugadores cobrando 400 o 600 euros, o casos puntuales de 900 euros.
