La Real Federación Española de Fútbol anunció ayer que, una vez alcanzado el plazo establecido en el Reglamento General de la RFEF, ha constatado, de acuerdo con la información recibida por parte de la Comisión Mixta de AFE-Segunda División B, que los clubes Gimnástica de Torrelavega y Unión Deportiva Salamanca no se encuentran al corriente de pago de las cantidades denunciadas por los futbolistas de sus equipos principales y reconocidas por la mencionada comisión. De acuerdo con los artículos 192 y concordantes del Reglamento General de la RFEF, los equipos principales de esos clubes no podrán participar en Segunda División B en la temporada 2013-2014, pudiendo hacerlo en la inmediatamente inferior. Como consecuencia de ello, el Salamanca B también baja de Tercera a Preferente Autonómica. Sin embargo, dado que el empresario Juan José Hidalgo compró los derechos federativos de la Unión, en el horizonte se presenta un nuevo frente judicial. La Justicia deberá aclarar si esa adquisición es libre de cargas (las deudas a jugadores), como así recoge el auto emitido por el Juzgado de Instrucción número 4 de Salamanca. De esta forma, la responsabilidad de pago a los jugadores es de la sociedad liquidada y no al nuevo club. Cabe recordar que la RFEF aprobará un nueva disposición del reglamento en la que se endurecen los requisitos para refundaciones encubiertas como la que se ha llevado a cabo en Salamanca.

En el polo opuesto se sitúan los otros 13 equipos que fueron denunciados por impagos. Destaca el caso del conjunto cántabro del Noja, que el viernes parecía condenado. Sin embargo saldrá a competir la próxima temporada en Segunda B al haber pagado los 62.250 euros que debía a 11 de sus jugadores. El club ingresó ayer esta cantidad vía Banco de España a la cuenta de la Asociación Española de Futbolistas (AFE). La cantidad adeudada era menor de la anunciada en un primer momento, ya que al revisar los contratos de los jugadores se ha confirmado que no ascendía a 66.350 euros sino a 62.250 euros. Los jugadores han recibido a través de una llamada telefónica la confirmación oficial por parte de la AFE del ingreso del dinero en sus cuentas. También se libraron del descenso administrativo el Real Unión de Irún gracias a un anticipo de la Real Sociedad y el Albacete, salvado por la familia Iniesta.