El entrenador del Alondras juvenil explica que, desde el paro forzoso de la competición y los entrenamientos, el cuerpo técnico ha diseñado dos fases distintas de trabajo individual para los jugadores. La primera, durante el encierro más severo de la población, era más ligera y contemplaba también un control de la alimentación para los jóvenes. "El ejercicio se hacía en casa y éramos conscientes de que no todos tienen espacio y maquinas para realizar el trabajo", indica José Antonio Rodríguez.

Al permitir las salidas por franjas horarias pusieron en marcha una segunda propuesta de trabajo más intenso, con ejercicios de fuerza y de resistencia más completos. "Entrenan tres días y descansan el cuarto, de forma que cada semana tengan seis días de ejercicio", apunta.

A mayores, el cuerpo técnico mantiene reuniones grupales telemáticas con los jugadores "para mantener la cohesión de la plantilla, que será necesaria de cara a la próxima temporada.

La pretemporada del Alondras juvenil comenzará seis semanas antes del inició de la competición oficial de la campaña 2020/2021, pero todavía no hay una fecha decidida para ello por lo que la planificación durante el verano se antoja larga.