El destino volvió a regalar un desenlace cruel a un Frigoríficos del Morrazo que cayó esta tarde por 26-27 ante el Qabit Guadalajara y que sufre de este modo un revés en el que se prevé largo camino hacia la permanencia. Los cangueses cayeron hace quince días por la mínima ante el Benidorm y hoy repitieron la historia, aunque con matices. El conjunto que entrena Magí Serra completó un extraordinario primer tiempo, dominó el choque en su práctica totalidad, pero acabó desinflándose con un parcial en contra de 3-8 en los últimos diez minutos de partido. El equipo visitante le dio la vuelta al duelo a falta de minuto y medio y ya no dejó escapar la victoria.

Nada hacía presagiar este final. El Cangas se puso el traje de faena desde el primer minuto y entró con fuerza en el encuentro. Defensivamente se mostraba muy sólido, hiperactivo, con constantes salidas y contactos que impedían la circulación de balón de un Guadalajara que comenzaba a estar incómodo. Y en ataque los locales jugaron con inteligencia. César Montes planteó un 6.0 con mucha profundidad en la zona de Muratovic, obligando a los de Serra a limitar su radio de acción ofensivo. Pero Aranda y sobre todo un brillante Chapela comandaron a los de O Morrazo (5-3, minuto 12) antes de su primer estirón (9-5, minuto 17, con tiempo muerto de Montes). Javi Díaz se unió entonces a la fiesta y llegaba la máxima diferencia (13-8, minuto 25) mientras los esfuerzos de los visitantes por recortar caían en saco roto (14-10 al descanso).

En la reanudación el Guadalajara cambió por completo su defensa y situó un 5.1 nuevamente con un Muratovic que cumplía su partido 300 como foco de atención. Los locales se topaban con los palos y el cuadro alcarreño enjugaba diferencias (15-13, minuto 35). Pero primero Díaz y luego un par de buenas acciones ofensivas devolvían la renta al Cangas (20-16, minuto 45, con nuevo tiempo de César Montes). Los visitantes pasaron entonces a un 3.3 y el intercambio de goles era continuo antes de que los errores de los de Serra acortasen las diferencias. El Frigoríficos se mostró muy plano atacando el nuevo dispositivo defensivo castellanomanchego y llegó el empate (25-25, minuto 57). Lejos de llegar la reacción morracense, Moya puso el 25-26 a falta de minuto y medio. Moisés tuvo el empate en sus manos pero su lanzamiento se topó con Hombrados y el palo y Vigo sentenció antes de que Moisés colocase el 26-27 definitivo.