El Embutidos Lalinense consiguió ayer una importante victoria por 24-27 en la pista del Tenerife. El siempre incómodo viaje a las islas dejó un partido extraño, en el que los rojinegros deperdiciaron una clara ventaja para terminar sufriendo más de la cuenta. El resultado sin embargo sabe a gloria para un equipo que suma cuatro victoria en cuatro partidos antes de afrontar un momento clave de la temporada con partidos en el Lalín Arena ante Chapela y Calvo Xiria en las dos próximas jornadas que pueden consolidarlos en las primeras posiciones.

Para llegar en una buena posición a este momento los lalinenses debían vencer a un Tenerife que nunca se rindió a pesar de comenzar el partido con un 0-6 en contra. Con un parcial de 4-0 a su favor lograron volver a meterse en el encuentro con una primera parte en la que llegaron a empatar pero que finalizó con un 11-12. En la segunda parte el Embutidos Lalinense consiguió un colchón de dos o tres goles que se mantuvo casi inalterable hasta el final.

"Empezamos muy bien pero nos empataron, más por culpa nuestra que por lo que hicieron ellos. Caímos en precipitaciones y nos metimos en guerras que no eran las nuestras. Tenemos que aprovechar esas ventajas y no dejar que se vuelvan a meter. Los partidos no se ganan en diez minutos", afirmó Cacheda tras el encuentro.