La Selección Gallega cadete de fútbol sala participó en la fase previa del Campeonato de España Sub-16 masculino de Fútbol Sala que tuvo lugar en Murcia. Los jugadores dirigidos por Luis Gómez y Toni Lodeiro desplegaron un buen juego en los tres partidos que disputaron en Molina de Segura pero todos ellos se saldaron con derrotas. En el combinado autonómico destacó sin embargo el estreno de un dezano y no en la pista, sino como integrante del cuerpo técnico. Gustavo Rodríguez, conocido futbolísticamente como Gus, vivió su primera experiencia con la selección gallega ejerciendo como fisioterapeuta del grupo.

La presencia del fisioterapeuta trasdezano en la convocatoria para Murcia partió de la necesidad del combinado gallego de encontrar una persona que se amoldase a sus necesitades para esta fase previa. "Tengo una amiga que trabaja como fisio con la selecciones gallegas femeninas y fue la que me avisó de que había una vacante en una selección masculina. Me ofrecí y me llamaron poco después. Este campeonato me coincidía bastante bien, así que decidí aceptar. Creo que fue una experiencia positiva", explicó.

En Murcia, Galicia se enfrentó a tres duros rivales. "Fue una encerrona total, porque nos enfrenamos a los actuales campeones y subcampeones, Madrid y Murcia, y a Ceuta, que también es un gran equipo. A pesar de eso y de llevar poco tiempo de trabajo, creo que el equipo lo hizo muy bien. Contra Madrid incluso fue un partido muy igualado", valoró.

Gus reconoció que le gustaría repetir con la selección en caso de que las fechas de torneos le permitan compaginarlo con su trabajo al frente de Heia Fisioterapia, su clínica en Silleda. "Fue una experiencia bonita y no me importaría repetir. Quedaron de mandarme el calendario de las próximas competiciones para ver si puedo compaginarlas. Por mi parte estaré encantado de volver", afirmó. Una de las cosas que más valoró fue la posibilidad de trabajar "desde dentro", aunque a muy corto plazo. "Es un trabajo más de campo, sobre la pista, y de recuperación rápida para que los jugadores noten lo menos posible el cansancio de varios días jugando seguidos", argumentó.

La única pega que el fisioterapeuta puso a su estreno con la selección gallega cadete de fútbol sala fue que le impidió ayudar a su equipo en el campo. El central es, a sus 34 años recién cumplidos, una pieza básica en un Silleda que lucha por continuar una temporada más en Primera Autonómica. A lo largo de su carrera Gus destacó por su larga etapa en el Lalín, aunque también jugó en equipos como el Bertamiráns.