Balonmano - Honor Plata

El Asmubal se impone desde la defensa en una gran segunda parte

Fajardo y Miniño fueron las anotadoras del equipo meañés con 7 y 9 tantos respectivamente - El equipo se sitúa séptimo

Una jugadora del meaño lanza a portería en un duelo en Coirón.

Una jugadora del meaño lanza a portería en un duelo en Coirón. / Noé Parga

T. H.

El Inelsa Solar Asmubal se impuso al Lavadores (31-28), merced una segunda parte en la fue creciendo defensivamente conforme avanzaba el período, y en ello fraguó en los últimos 20 minutos la victoria. El cuadro meañés completa así una excelente primera fase de liga -cediendo tan sólo un derrota, que fue ante el líder en Coirón-, que le permite irse así al parón navideño, séptimo, en mitad de la tabla, con 16 puntos, mismo a tres de la segunda plaza, con seis equipos apretados en el margen de tan sólo tres puntos. Visto lo visto, a estas alturas, y tal como pintan las cosas, las verdinegras tienen medio billete para su objetivo, que es la permanencia.

Ante el Lavadores, en la primera parte se confirmó el temor del que alertaba antes Juan Costas. El equipo, laxo en exceso -como la afición en el pabellón-, ante un rival que llegaba penúltimo, se dejó ir en el primer tiempo, para acabar dando bríos al rival. El partido arrancara con un 6-3, que registraba el marcador en el minuto 11. A partir de ahí, el repliegue defensivo de las verdinegras pasó a dejar que desear. Eso lo aprovecho el Lavadores para limar su deventaja, poniéndose a uno en el 21’ (11-10). Y ahí, un 1-3 de parcial, con goles de Quintana y dos de Gil por parte viguesa, puso por primera vez al Lavadores arriba (12-13). Los últimos minutos del primer tiempo ofrecían ese buen momento anímico al Lavadores, más aún cuando, sobre la bocina, un gol de Bugallo le permitía irse arriba con un gol psicológico (14-15).

El inicio del segundo tiempo no fue halagüeño. Las pérdidas de balón y varios ataques francos marrados, propició que el cuadro vigués abriera renta de 3 en el 37’ (17-20). Sólo con la alarma encendida empezó a hacerse valer la zona central del 6-0 defensivo verdinegro, consciente de que desde ahí tenía que empezar la remontada. Una zona que, bien comandada por Vanesa Domínguez, arrastrando a Fajardo y Miniño a multiplicarse en la labor, se tornó numantina. En base a ese fuerte, contestaron con un parcial de 5-1, que cerraba Cores para volver a poner arriba a las verdinegras (22-21). Tras unos minutos de igualdad, llegó el segundo arreón del Asmubal, que en el 49’, con un 25-24, materializaron un 4-1 de parcial, que prácticamente cerraba el choque subiendo en 29-25 en el 55’. Nada pudo contrarrestar el Lavadores en esa fase, ni sus tiempos muertos ni su apuesta por el 5-1 defensivo y luego por la mixta sobre la mano maestra de la central verdinegra Eli Méndez. Pero todo resultó inútil ante un Asmubal para entonces ya superior.

Juan Costas valoraba esta primera parte del campeonato que toca a su fin: “hemos completado una gran primera vuelta -reconocía-, y arrancamos la segunda con otra victoria, lo que nos permite irnos al parón navideño con los deberes cumplidos”. “En honor a la verdad -agrega- hemos hecho una fase mejor aún de lo esperado, ni en las previsiones más optimistas creíamos estar donde estamos: hemos peleado de tú a tú a todos los rivales de la liga y, a excepción de líder Puerto del Carmen, demostramos que podemos pelearle el partido a cualquiera”. Un logro que es mucho para un concello pequeño como Meaño, que es de lo más humilde de una categoría del balonmano nacional.

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