El Arosa se ha visto obligado a solicitar la anulación del encuentro que tenía que disputar esta misma tarde ante el Arenteiro en O Espiñedo. El motivo no ha sido otro que el azote de casos COVID en la plantilla arlequinada que, sumados a las bajas de larga duración y sanciones, han hecho que el también sancionado Jorge Otero se quedase sin efectivos para poder competir.

Desde la pasada semana se fueron repitiendo casos positivos en el equipo. Algunos como Ross y Diego Diz ya habían superado la cuarentena, al igual que posteriormente otros como Cotilla, Campillo o Mon. Sin embargo, en los test de antígenos celebrados en el entrenamiento del pasado jueves, volvieron a detectar nuevos casos que afectaron a jugadores como Manu Táboas, Piay y Pedro Beda lo que obligó a solicitar el aplazamiento.

En los test de antígenos celebrados en el entrenamiento del pasado jueves, volvieron a detectar nuevos casos que afectaron a jugadores como Manu Táboas, Piay y Pedro Beda

Además, la portería también se vio notablemente mermada dado que al positivo de Táboas hay que sumarle la baja de Álex Cobo que, aunque ya está en la última fase de recuperación de su lesión de menisco, todavía no cuenta con el alta médica. Un hecho que dejaría la portería en manos del juvenil David Conde.

El propio Jorge Otero se manifestó al respecto de esta situación señalando que “el aplazamiento es la decisión más lógica y hay que afrontarlo como viene. Bastante aguantamos tal como está la situación. Ahora esperando que la gente se mejore, que recuperen bien y al siguiente partido y a entrenar cuanto antes posible”.

La Federación Española quiere ahora que ambos clubes fijen una fecha lo más próxima posible.