El impacto de la pandemia está golpeando con fuerza en el la competición de Preferente. El alto número de partidos aplazados a consecuencia de los casos positivos está convirtiéndose en una preocupación para los clubes arousanos que empiezan a ver muy complicado el encajar los encuentros en el calendario.
Solo el Céltiga ha sido capaz de llegar al día de hoy habiendo disputado las trece jornadas calendadas, si bien ha sido porque ya ha disputado los aplazados que tuvo en su día. Sin ir más lejos, los de A Illa protagonizaron ayer junto al Valladares el único partido que se pudo disputar de toda la jornada en el grupo en el que compiten los representantes arousanos.
El Juventud de Cambados ya suma tres aplazamientos, los mismos que el Portonovo. Con dos fechas por recolocar están el Umia y el Ribadumia y a todo ello, hay que añadir la dificultad de controlar el aumento de casos.
La falta de continuidad en los entrenamientos y en la competición es otro aspecto que también está alterando por completo el devenir de una temporada medianamente normal, para desesperación de jugadores, técnicos, clubes y aficiones.
