Tras la temporada en blanco por la COVID en categorías autonómicas, el Unión Dena regresó en Primera con su mejor arranque liguero en la categoría. Es el líder invicto del grupo 5B tras cinco jornadas, lo que no entraba en las mejores previsiones. Esta temporada se ha conformado con una liga de dos fases al sprint. En esta primera, de los diez del grupo, los cuatro primeros clasificarán para jugar una segunda por el ascenso, mientras que los seis restantes lo harán por evitar el descenso. Y esa segunda fase será más frenética aún: los cuatro que clasifiquen jugarán sólo contra los otros cuatro del grupo 5A (Vigo y área sur), no disputando partidos con los rivales que procedan del 5B, lo que, en la práctica, se traduce en cuatro rivales a doble vuelta. Brilla en el equipo su entrenador, Juan Alarcón. Natural de Portonovo, y tras forjarse como técnico en la base del Noalla y del Portonovo, se estrenó en el sénior con Libertad en autonómica. De ahí llegó como segundo de Barbeito al Dena, para acabar asumiendo la dirección como primer entrenador a inicios de 2019. Hoy, ha regresado para formar tándem con él Isidro Barbeito, ahora éste en papel del segundo.

–¿Tras la temporada en blanco en la autonómica por el CoVID, Los jugadores han vuelto con más ganas de fútbol o ha tenido que convencer a algunos de retornar?

–-No, había hambre de fútbol, eso se nota en los jugadores y en la grada de As Cachizas, porque es un público muy fiel, que sigue respondiendo con buenas entradas. A la hora de volver, lo que se temía más era coger hábito y dinámica, y para eso se precisaba más tiempo. Por ello hicimos un pretemporada de ocho semanas, en vez de las cinco que veníamos haciendo antes

–Para el Dena ha sido volver y besar el santo, cinco jornadas y líder invicto, algo que es histórico para un club tan modesto.

–-Hemos reunido un buen plantel, tenemos mejor grupo que antes del COVID-19, se ha ganado en experiencia. El fichaje de Suso Bea, que llegaba del Vilalonga, para asumir su posición de central en la defensa ha sido un muy buen refuerzo. Además recuperamos a Borja para el centro la zaga, que había estado parado más de dos años por una lesión. Giao y Rosal, que en principio se iban al Vilalonga, pero que no jugaron por COVID, siguen en las filas del Dena, tres juveniles del Portonovo, y cuatro más del Dena que ya están entrenando con el primer equipo… Ha cuajado un grupo fantástico

–Apunte una clave de este buen arranque.

–Creo que la clave es el grupo que se ha forjado, están todos más implicados, ninguno se descuelga, todos tiran al alimón, y eso se nota en la dinámica de grupo.

–¿Hace más apasionante el haber concebido dos subgrupos en una liga en dos fases más cortas?

–No sé si más apasionante, pero si más fratricida. Es una liga con dos fases a cara de perro, sin apenas margen para esperar a reaccionar con la segunda vuelta. Al poco que coges una mala racha te lleva abajo enseguida. De cara a la afición puede motivar más, porque estamos jugando con equipos cercanos, con muchos derbis entre nosotros. Y en cuanto a la economía de los clubes, sí es cierto que se ahorran viajes a la zona de Vigo y sur de la provincia.

–¿Tiene premio para la segunda fase el entrar como campeón de grupo?

–Sí, se asigna un número diferente de puntos en función de puesto con que se clasifique de la primera fase. El líder entraría con 5, y eso es una ventaja de partida

–¿Cuales son esos rivales que más teme en esta primera fase para asaltar el liderato del Dena?

–Sobre el papel, el Arcade y el Marcón. El Arcade viene de hacer una buena pretemporada, ha cerrado un buen equipo que irá a más. El Marcón me gusta: es un plantel joven, se parece al nuestro de hace un par de años… Es un equipo que ha pagado el perder la Preferente, se le han ido varios jugadores, ahora está con una nueva hornada de jugadores jóvenes que, en dos o tres años, darán el salto.

–Un Marcón que reciben ustedes el próximo domingo en Dena. ¿Qué dibujo tiene en mente?

–El nuestro está siendo el 3-4-3 o bien en 4-2-3-1, en función del rival. Tocará pensarlo, pero el Marcón es un equipo con mucho desparpajo, suelto, rápido… Será un partido complicado.

–¿Viéndose ahí arriba, uno se replantea objetivos para soñar?

–No, no, para nada. El objetivo es asegurar la categoría cuanto antes y clasificar en esos cuatro primeros puestos, lo que nos llevaría a una segunda fase en la jugaríamos sin la presión de la permanencia… En ese caso, tocaría disfrutar y ver de lo que somos capaces.