El Cortegada truncó su racha de tres victorias consecutivas a manos del Adareva. Entre la conjugación de factores que están detrás de cualquier resultado que se precie, en lo que respecta a lo sucedido en Fontecarmoa hay uno totalmente indiscutible y con nombre y apellidos: Alima Dembele.

La ala-pívot del conjunto tinerfeño demostró las cualidades que la destacan como la mejor jugadora y máxima anotadora de la competición. Sus 41 puntos finales fueron la rúbrica a una actuación individual que no se recuerda en el lugar. Incluso las estadísticas no reflejan del todo la jerarquía de la africana en el partido con canastas que sirvieron de auxilio para su equipo en momentos en los que las vilagarcianas recuperaban opciones en el marcador.

La defensa del Cortegada no mostró ayer la consistencia necesaria ante un equipo muy físico. Iñaki Abella

El arranque fue prometedor para las de Javier Nogueira. La dinámica inicial de partido les convenía. Todo fluía en un juego de escasa intensidad defensiva. Sin embargo, en cuanto el Adareva empezó a lucir músculo todo empezó a tomar un cariz diferente. Más de cuatro minutos se pasaron las locales sin poder anotar pasando de un 14-12 a un 14-17 con el que se cerró el primer cuarto.

La ala-pívot del conjunto tinerfeño demostró las cualidades que la destacan como la mejor jugadora y máxima anotadora de la competición. Sus 41 puntos finales fueron la rúbrica a una actuación individual que no se recuerda en el lugar

Aquello que empezaba a intuirse se convirtió en cruda realidad en el segundo cuarto. La dificultad para encontrar caminos expeditos al aro se mantuvo en el ataque de las vilagarcianas. El Adareva hizo de la presencia física de sus jugadoras interiores el pilar innegociable sobre el que sustentar su caminar en el encuentro.

El partido se ajustó hasta los cinco puntos de margen en el tramo final. Iñaki Abella

El parcial negativo de las locales se incrementó hasta un significativo 2-19. Todo en pleno recital individual de una Alima Dembelé que a esas alturas de encuentro ya había acumulado 16 puntos. Su repertorio de acciones individuales eclipsaba cualquier defensa con canastas desde cualquier distancia y ante cualquier rival.

La máxima desventaja del Cortegada llegó a ser de 16 puntos (19-35). Dos triples consecutivos aliviaron la carga en los guarismos para irse al descanso con un 26-39 y, sobre todo, con la sensación de haberse cerciorado de que la defensa y el ritmo iban a ser las bazas a gestionar para aumentar las opciones de partido.

La línea de tres puntos como trampolín hacia la esperanza

Con Dembelé siguiendo con su recital particular, la línea de tres puntos se convirtió en el trampolín hacia la esperanza. Las primeras cinco canastas en juego de las vilagarcianas en la segunda parte fueron desde la larga distancia con una Zeltia Presas especialmente acertada (43-49). La desventaja llegó a ser incluso de dos puntos (53-55), pero Dembele siempre aparecía en el momento oportuno.

El público volvió a las gradas de Fontecarmoa. Iñaki Abella

A base de insistencia y fe, el equipo de Javier Nogueira llegó a meter el miedo en el cuerpo al Adareva (64-69) con cerca de tres minutos por delante. Algunas pérdidas de balón y los once puntos anotados por la mejor jugadora de la liga en ese tramo final, terminaron por finiquitar las posibilidades de apuntalar la tendencia al alza de las vilagarcianas delante, por fin, de su público de Fontecarmoa.

Ficha de partido:

Cortegada: 69

Patricia Vicente (13), Cristina Loureiro (9), Sara Gómez (11), María Centeno (7), Tereza Sedlakova (17) –quinteto inicial– Zeltia Presas (9), Lorena Castro (-), Miriam García (-) y Mercy Wanyama (3).

Adareva Tenerife: 80

Alima Dembele (41), Noelia Ibáñez (6), Déborah Luque (12), Laura Ilunga (8), Ainhoa Negrín (2) –quinteto inicial– Alessia Contino (-), Evelyn Adebayo (9), Claudia Reynés (-) e Ylenia Expósito (2).

Parciales por Cuartos: 14-17; 12-22 (26-39); 27-19 (53-58); 16-22 (69-80).

Árbitros: Julio César Alonso y Samuel Martínez. 16 faltas a las locales y 19 a las visitantes.

Incidencias: Jornada número 22. Cerca de 150 espectadores en Fontecarmoa.