La mejor cura para una derrota siempre es una gran victoria. Eso fue lo que consiguió ayer el Arosa en un encuentro en el que demostró los motivos por los que se le considera un aspirante a pelear por los primeros puestos. Los arlequinados fueron efectivos, ordenados y supieron sufrir ante un rival que posee una gran variedad de armas para pelear por esos puestos. Los hombres de Rafa Sáez supieron controlar la situación, sobre todo en la segunda parte, y gozaron de alguna ocasión para ampliar la ventaja, sobre todo una de Pedro Beda que sacó con los pies el meta ourensano. A estas buenas noticias se une la recuperación de Sidibé que, ayer, pudo volver a sentirse futbolista tras dos años y medio lesionado. Su recuperación abre muchas alternativas para Sáez en el centro del campo.

El Arosa se plantó sobre el campo de O Couto con las ideas muy claras, juntando líneas y sin correr riesgos atrás ante una UD Ourense que aplicó un ritmo muy alto en los primeros instantes del encuentro. Sin embargo, los arlequinados pronto golpearon fuerte adelantándose en el marcador. La jugada del 0-1, que sería clave para alcanzar los tres puntos, nació en una subida del lateral Javi Fontán que, tras recibir un pase de Campillo, sorteó a varios rivales y se metió en el área, dando un pase atrás a la frontal, donde apareció Mon, cuyo disparo con la zurda se coló por la escuadra como un obús sin que el meta local pudiese hacer gran cosa.

El tanto podría suponer un duro revés para los locales, pero estos no se vinieron abajo. Arropados por la hinchada local, los jugadores de la UD Ourense reaccionaron con rabia, tomaron el mando del encuentro y comenzaron a encerrar al equipo visitante en su campo. El Arosa vivió momentos de agobio y le tocó trabajar en defensa, sobre todo para rechazar el balón parado de los de Fernando Currás.

La UD estaba lanzada, pero fue el Arosa el que dispuso de la mejor ocasión para ampliar su ventaja. Corría el minuto 35 cuando Róber, tras robarle el balón a un rival, filtró un pase al espacio para Pedro Beda. El delantero brasileño inició una carrera que su par no fue capaz de frenar, se plantó solo ante Dani Sampaio, pero estrelló el balón en el joven meta ourensano.

El susto aplacó un tanto los ánimos del Ourense, que seguía atacando para tratar de restaurar las tablas al marcador, especialmente a través de Alfredo en las acciones de balón parado. También el Arosa tuvo la posibilidad a balón parado en un disparo de Fajardo que repelió el meta ourensanista.

El ingente esfuerzo físico realizado por los locales en la primera mitad pasó factura en la segunda. Los locales no iniciaron el encuentro con los bríos de los primeros momentos del partido. El Arosa seguía a lo suyo, mantener la ventaja en el marcador y tratar de aprovechar alguna jugada para cerrar el encuentro. De hecho, fueron los arlequinados los que tuvieron más oportunidades en el reinicio, como en una internada de Javi Otero a la que no llegó Róber.

Los cambios introducidos por Rafa Sáez sirvieron para refrescar al equipo arlequinado, que volvió a asomarse por las inmediaciones de la meta de Dani Sampaio con cierto peligro, como en una ocasión de Róber que, tras recibir un pase de Pablo Pillado, no fue capaz de superar al meta ourensanista.

Cuando transcurría el minuto 81, el Arosa recibió otra gran noticia, el regreso a un partido de competición de Sidibé dos años y medio después de romperse la rodilla, El centrocampista ofreció diez minutos a un buen nivel, manteniendo al Arosa en la zona ancha. El Ourense lo intentaba, pero con poco éxito, sin meter en apuros a Manu Táboas, que vivió una tarde relativamente tranquila. Los de Rafa Sáez todavía gozaron de un par de ocasiones en las que estuvieron cerca de ampliar su ventaja.

La próxima cita del Arosa será con otro de los equipos ourensanos ya que el próximo domingo recibirá a un remozado Ourense CF en el campo de A Lomba con el objetivo de mantener la racha para acercarse a los puestos altos de la tabla.

Rafa Sáez // Entrenador del Arosa: “Teníamos la necesidad de ganar”

Rafa Sáez se mostraba ayer satisfecho por los tres puntos que el equipo trae de Ourense. El técnico arlequinado reconocía que “tras el tropezón del primer partido, no había una urgencia por ganar, pero sí la necesidad por lo corta que es la liga”. Sáez está satisfecho con sus jugadores porque “lo único que podemos esperar tras una derrota es una respuesta, y esa es ganar, no nos valía que el proceso de juego fuese excelente si no sumábamos los tres puntos”. La victoria no fue sencilla precisamente. Sáez reconoce que sus jugadores tuvieron que ponerse el traje de faena. “Creo que nos viene bien tener capacidad de sufrimiento, que hay que hacer ese esfuerzo, por eso hay que estar contentos y felicitar a los jugadores”. Ante un rival tan complicado, que puso en muchos aprietos al Arosa, los arlequinados pudieron vivir más tranquilos, “creo que si Pedro Beda hubiese aprovechado la ocasión que tuvo, quizás hubiese sido algo más sencillo para nosotros”.

De todas formas, Sáez también alabó el partido realizado por el rival. “Siempre diré que delante hay un adversario que también propone y que tiene argumentos; el Ourense es un equipo que propone, que incluso en la derrota de Alondras, estuvo bien, crea ocasiones, tiene carácter y nunca da el partido por perdido, y hoy lo demostró”. Otra de las grandes noticias que deja el encuentro es la presencia de Sidibé en el encuentro, “son dos años y varios meses de una lesión de la que no muchos regresan al fútbol, por eso estamos muy contentos por él y por la gente que le ayudó”.