El Bairrada portugués domina la primera jornada de la VII Ruta do Albariño que se centraba ayer en Meaño. Por la mañana con una cronoescalada de 3 kilómetros hasta el alto de O Busto y por la tarde con una etapa en ruta Meaño-Meaño, con 65 kilómetros por este municipio más una incursión en el vecino concello de Sanxenxo. En ambos sectores, triunfo incontestable para el costarricense, del Bairrada luso, Julián Espinoza.

El sector de la etapa en línea retrasó su salida -prevista para las 17 horas-, motivado por un altercado violento protagonizado por un vecino meañés, contra uno de los responsables de un club participante que había estacionado el vehículo del equipo delante de la salida de su vivienda. Ello obligó a la actuación de los agentes de la Guardia Civil motorizados para cubrir la prueba, que lo redujeron colocándole unas esposas, y ordenaron luego su traslado en ambulancia a un centro sanitario, debido el exacerbado estado de ánimo del vecino. Mismo el médico de la carrera tuvo que actuar para asistir a un familiar afectado por el episodio acaecido.

Ello propició un retraso de 20 minutos de la etapa en ruta que partía así al filo de las 20 horas, con 80 ciclistas en representación de 16 equipos, de ellos cuatro portugueses, dos castellano-leoneses y diez gallegos, dispuestos a salvar los 65 kilómetros de recorrido.

A su paso por el centro de Meaño, procedente de Nantes y Lores, un dúo portugués del Bairrada se distanciaba pasando con unos metros de ventaja sobre el pelotón en apenas 8 segundos para afrontar el último tramo de la etapa: 8 kilómetros que le llevarían por la PO-303 hacia Xil, y bajar luego a Dena para encarar la PO-550.

Una vez, en pleno centro de la localidad, el pelotón tomaba la carretera que sube de vuelta hacia Meaño, un tramo de 3 kilómetros en subida y apenas dos pequeños tramos llanos. Los últimos 700 metros, subiendo por A Solda posibilitaron que el dúo portugués del Bairrada, integrado por Julián Espinoza y Diogo Narciso entraran por ese orden juntos en meta, aventajando a Jesús Antonio García González, del Arte en Transfer-Lps leonés en apenas 5 segundos, llegando tras él resto de un estirado pelotón.

En la entrega de premios y maillots, con el diputado provincial López Font y la alcaldesa Lourdes Ucha en una de sus últimas apariciones públicas de un mandato que toca a fin, Diego Narciso se enfundaba el verde, como líder de las metas volantes; el ciclista luso, también del Bairrada, Joao Carvalho, el maillot a lunares de la montaña; Ramón Fernández, de la formación pontevedresa Aleata-Farto, se enfundaba la camisola azul y blanca como mejor gallego; y, como colofón, el costarricense Julián Espinoza, el amarillo de líder de la Ruta do Albariño, tras dominar los dos sectores, posición que defenderá hoy en la segunda y última etapa Cambados-Cambados, con salida a las 10.30 horas y un recorrido de 92 kilómetros.