No apareció candidatura alguna para la presidencia del San Martín en la asamblea celebrada al mediodía del pasado domingo en el Centro Social Deportivo. Una sesión a la que esta vez acudió una treintena de socios y en la que la junta que preside Ramón Mariño ofreció un balance de cuentas que, a 31 de marzo, dejaba patente el saneamiento del club. Y es que esta directiva había cogido la entidad en situación de emergencia al inicio de temporada, con una deuda de 24.000 euros que parecían hacerla inviable. Sin embargo, la labor realizada por este equipo, trabajando en sponsors y mecenas, permitió in extremis reflotar al San Martín, dejando a 31 de marzo de 2019 un total de 28.000 euros en positivo en caja. Aunque parte de ese dinero deberá emplearse en pagar entrenadores y afrontar otros gastos en este tramo final de temporada, las previsiones son que puedan quedar en caja unos 18.000 euros para afrontar nuevos proyectos.

Dado que ninguno de los socios que concurrió se postuló para la presidencia, la actual junta volverá a ofrecer un nuevo plazo y convocar una segunda asamblea antes de final de mes. El objetivo es contar con un presidente que disponga, a partir de ya, de un plazo de dos o tres meses para conformar su directiva y definir el nuevo proyecto, asumiendo el mando del club para cuatro años a partir de la asamblea de julio, y en la que se ofrecerá el balance final de la temporada.

La temporada 2018-19 había arrancado turbia para el San Martín. Mismo a inicios de septiembre el técnico vigués Luis Oliveira, que había asumido el equipo y dirigía la pretemporada, renunciaba justo en la semana de arranque liguero, a lo cual se sumaba la marcha de varios jugadores. La asamblea de urgencia convocada al efecto, para afrontar la delicada situación económica del club, llevó a que tres expresidentes, en las personas de Ramón Mariño, Tuco Renda, Pepe García, se aviniera a hacer causa común para mantener la nave aflote. Alguno de ellos emblema de un histórico club, caso de Tuco Renda, que a sus 70 años, había acumulado 34 años vinculado al club, el cual presidió en tres etapa, la primera sumando 12 años consecutivos, luego tres y 18 en la última, amén de luego de haber ejercicio como directivo.