Un total de 37 son los goles que ha concedido el Ribadumia en la primera mitad de la temporada. Una cifra muy a tener en cuenta a la hora de explicar los motivos que han llevado al equipo de Luis Carro a no ser capaces de poner freno a su negativa inercia.

Con casi una media de dos tantos en contra, el técnico del Ribadumia sabe del lastre de su equipo en esta faceta, pero también matiza que "muchos de esos goles se produjeron en partidos muy concretos. Ourense, Polvorín y Compostela nos metieron cinco y el Arosa cuatro. Es más de la mitad del total concentrados en solo cuatro partidos".

Tiene bien claro el técnico vilanovés que uno de las dificultades a la hora de encajar tanto está en las situaciones de duelos individuales, "sabemos donde está el problema y tenemos que dejar el menor número de situaciones posible de individualidad defensiva y todo pasa por hacer un trabajo colectivo muy bueno".

Pone como ejemplo el buen trabajo realizado en Ferrol el pasado domingo, "estuvimos muy serios y el 1-0 fue un castigo excesivo porque no se pita una falta muy clara en la pérdida de balón que da origen al gol. También en Carballo ante el Bergantiños perdimos 1-0. Son resultados que nos permiten poner las cosas en contexto y darnos cuenta que también estamos capacitados para defender".

Curiosamente el duelo del domingo presenta importante contrastes puesto que se verán las caras la mejor defensa de la liga, la del UD Ourense con 13 tantos encajados, y un Ribadumia en línea opuesta.