El Calmear Rasoeiro afronta esta tarde en Vigo a las 17 horas un partido de su liga, vital por la permanencia, y en el que se mide a un Academia Octavio que es colista, y que todavía no ha puntuado en lo que va de liga, tiempo en el que el Rasoeiro sumó dos puntos que le ponen fuera del descenso.

Ante el choque Quito Parada cuenta con todos sus efectivos, excepto Henrique en portería, por lo que tirará del juvenil Costa como segundo guardameta. En total, serán doce séniors y cuatro juveniles los que conformarán la convocatoria.

Al rival de esta tarde lo define como "un equipo joven, rápido, que ha perdido esta temporada a un lateral portugués que era una de sus referencias, pero que ha incorporado un pivote joven con más de dos metros de altura y que, con esa envergadura, puede causarnos muchos problemas, por lo que resultará fundamental frenarlo".

Cierto que los vigueses llegan a esta cita con el aliciente de un nuevo técnico, tras la destitución de Samuel Iglesias en el banco, lo que supone una incógnita añadida en relación con una defensa que el Octavio, hasta ahora, venía jugado bastante adelantada. De todas formas Quito Parada entiende que la clave "estará en defender muy juntos atrás y luego correr mucho porque el Octavio es un equipo que suele desorganizarse más cuando se apura su balance defensivo". Y es que el objetivo será imponerse a un ataque vigués que promedia tan solo 21 goles por partido, el más bajo de toda la categoría. Pero en contra el Rasu encaja una media de 32 goles por encuentro, la cifra más elevado de un equipo en toda la liga, lo que, de partida, no parece invitar al optimismo. Cierto que Quito Parada entiende que los número de su zaga no son muy reales: "es una cifra de goles -explica- que se ha visto condicionada porque nos hemos enfrentado a rivales de la zona alta, y además el equipo acabó dejándose ir en los tramos finales de las segundas partes, conforme los partidos se veían perdidos y cabía dar minutos a juveniles, ello contribuyó a engordar esas cifras".

El técnico grovense confía en el nivel de su defensa: "El equipo apunta- ha venido defendiendo ya muy bien en las últimas tres jornadas, y ante el Octavio, que va a ser de los equipos que estará toda la liga peleando por la zona baja, nos debemos emplear a fondo atrás y ser contundentes arriba, porque es un partido vital. Nosotros tenemos ahora cuatro jornadas claves ante Octavio, Teucro, Bueu y Cangas".