El Umia perdió en Salceda los puntos y la calma. Y es que el partido se saldó con un parte de sancionados más que preocupante. Cuatro expulsiones y un sinfín de tarjetas amarillas es el bagaje que se trajeron los de Barrantes de su visita al campo de A Gándara.

Se adelantaron los locales con un penalti, pero Juan de cabeza pudo hacer el tanto del empate antes del descanso. Pero pronto en la segunda parte volverían a cobrar ventaja los de Salceda de Caselas en una acción a balón parado mal defendida por la zaga visitante.

Nunca tiró la toalla el Umia. Julio remató al larguero una situación que pudo ser el empate y ya cuando el partido obligaba al Umia a atacar a la desesperada, se sentenció en una acción a la contra tras noventa minutos claramente marcados por el protagonismo arbitral.