La trayectoria del Arosa en la segunda vuelta se ha convertido en su mejor garantía en el último y decisivo mes de competición. El buen hacer de los arlequinados les ha llevado a situarse con una ilusión de la que no se ha podido disfrutar durante los últimos 25 años en Vilagarcía cuando solo restan cuatro jornadas.

Para más inri el buen hacer de los de Jorge Otero se plasma en unos números de lo más significativo en lo que se refiere a sus posibilidades de alcanzar una de las cuatro primeras plazas. El más sintomático es el que demuestra que solo los intratables Compostela y Bergantiños, primero y segundo en la tabla y ya clasificados para el play-off, han producido más clasificatoriamente que los vilagarcianos en las quince jornadas que se han disputado de la segunda vuelta.

El Compostela, con 35 puntos, sería también el líder teniendo únicamente en cuenta los partidos tras superar el ecuador liguero. Once victorias, dos empates y dos derrotas le contemplan con un balance goleador de un +20. Le sigue el Bergantiños con 32 puntos con un 10-2-3 y 30 goles anotados por 11 encajados. Y a continuación ya aparece el Arosa como el tercer mejor equipo de la segunda vuelta y dentro del selecto grupo que han alcanzado los 30 puntos con base en ocho triunfos, seis empates y un único tropiezo. Sus 27 goles anotados también le sitúan en el podio de la competición en este apartado.

Pero existen más indicios que sirven para aumentar el grado de confianza del equipo a la hora de pelear por las plazas de ascenso. Uno de ellos es el calendario. El hecho de tener que jugar tres de los cuatro partidos que restan en A Lomba puede resultar determinante. No hay que olvidar que el equipo vilagarciano es el único de toda la competición que no ha perdido ni un solo encuentro a domicilio en esta temporada.

Otra muestra de la solidez competitiva de los vilagarcianos es que han sido capaces de ver portería en todos los encuentros disputados, algo de lo que incluso no puede presumir ni los dos equipos ya clasificados para el play-off.

La única cuestión que queda en el debe del rendimiento de los vilagarcianos es el defensivo. Vaya como ejemplo que no han conseguido dejar su portería a cero en ninguno de los últimos seis enfrentamientos.

Por otro lado, el Arosa ha decidido que el partido del sábado ante el Céltiga (20.30 horas) sea considerado medio día de club.