El acierto fue el factor determinante en un final muy igualado en el duelo que mantuvieron el Noia y el Sigaltec. Los errores en algunos tiros liberados de los vilagarcianos se toparon con dos triples consecutivos de su rival, prácticamente en el último minuto, y que resultaron determinantes para este penúltimo encuentro de la competición de baloncesto.
Fueron los locales los que empezaron mandando en la cancha. A ello ayudaron las muchas pérdidas de balón de los jugadores naranjas desde los primeros compases de partido, así como una defensa demasiado concesiva.
La dinámica se mantuvo en el segundo cuarto. Las dificultades para anotar por parte del Sigaltec se hacían cada vez más evidentes, mientras que su rival estaba siendo superior en prácticamente todas las acciones de uno contra uno, sin olvidar el factor suerte que también ayudó en el camino.
El resultado al descanso (32-23) obligaba a reconsiderar lo realizado para tratar de encarar con algún éxito la segunda parte.
De hecho, la puesta en escena del Sigaltec tras el paso por vestuarios fue totalmente diferente. En solo dos minutos ya habían dado caza a su rival en el marcador, llegando incluso a disponer de cortas ventajas. Parecía que se iba a producir ese giro tan necesario para los locales.
El Noia fue recuperándose llevando el partido a un juego más físico en su ataque, dejando todo por decidirse para el último cuarto, decisión que les permitió obtener la ventaja que precisaban.
El Sigaltec volvió a contar con pequeñas posibilidades, pero varios errores en los tiros libres además de en el lanzamiento exterior en momentos puntuales terminaron por convertirse en factores determinantes en la derrota que les fue infligida.
Los vilagarcianos pondrán el sábado en Fontecarmoa ante el Cambre el colofón a la temporada en la que han conseguido clasificarse para competir entre los ocho mejores equipos de la categoría.
