Bendición de los dioses

El porvenir de Ainhoa Repáraz ilusiona al atletismo español. Se afirma desde la emoción y se constata desde la precisión científica. La velocista, viguesa de nacimiento, baionesa de residencia y gondomareña de militancia, recibió ayer el Trofeo José María Fernández Matinot como mejor promesa de 2022. Importan qué, de quiénes y a quién.

Cada martes, durante más de tres décadas, cenaba en Madrid un prestigioso grupo de entrenadores, jueces y directivos. Entre los impulsores de ese convite destacaba Matinot, que desde la empresa Unipublic promocionó el atletismo. De su mano visitaron los mítines españoles astros como Carl Lewis, Javier Sotomayor, Edwin Moses... El ejecutivo falleció en diciembre de 2013 y sus compañeros de tertulia decidieron instituir un premio en su nombre. Reparaz ha sido la sexta en ganarlo. Sucede a talentos como Aleix Porras, María Vicente, Mario Revenga y Pol Oriach.

El trofeo “a la promesa”, que se entrega a la vez que el Trofeo José Luis Alonso Riestra “al atleta del año” –Mariano García, esta edición–, se decide en función de criterios técnicos: consecución de la mejor marca nacional, resultados en los Campeonato de España y en el campeonato internacional más importante de su categoría. El baremo otorgó a Repáraz 195 puntos, superando a Berta Segura, Paula Blanquer y la lucense Xela Martínez, las tres con 185.

“Este tipo de premios siempre son muy valorables”, explica el entrenador de Ainhoa en el Val Miñor, Óscar Fernández. “Estamos superorgullosos por quién lo da. Son los gourmets del atletismo, gente importante. Llevan toda la vida en esto. Y tiene el nombre de Matinot, que fue alma del atletismo madrileño durante muchos años con Unipublic, como entrenador… Moría por el deporte y fue un renacentista. Tocó todos los palos”.

“Es un reconocimiento al trabajo hecho y no siempre en las mejores condiciones”, recuerda el técnico. “Si supieran cómo entrenamos, todos ellos alucinarían. Aún no tocamos el módulo cubierto. Hemos estado entrenando en mojado durante todos estos años, con un sacrificio enorme por parte de Ainhoa. Es una recompensa para todos”.

Fernández acompañó a su discípula en la ceremonia de entrega, celebrada ayer en el restaurante madrileño Varela de Madrid. Repáraz recogió el trofeo diseñado en exclusiva por el artista Pedro Moreno Linares. “La verdad es que estoy muy emocionada. Este premio es para mí un honor. Ha sido algo muy inesperado que me demuestra que todo esfuerzo tiene tarde o temprano su recompensa. Me sirve además como estímulo para continuar por el mismo camino”, indicaba la joven. “Me hace mucha ilusión compartir palmarés con otros atletas de la talla, por ejemplo, de María Vicente así como compartir esta noche con el otro homenajeado, Mariano García”.

Ainhoa Repáraz traspasa en 2023 la mayoría de edad. Reclutada por la Universidad de Ohio, en septiembre iniciará la aventura americana. Tendrá tarea antes: “Después de un invierno difícil por la meteorología y mis condiciones de entreno, afronto la temporada de aire libre con mucho deseo, sin perder de vista el Campeonato Europeo sub 20 en agosto en Jerusalén. El reto es difícil, pero son muchas las ganas”.

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