El Veszprem húngaro, donde milita el portero cangués Rodrigo Corrales, se juega hoy (15:15/DAZN) ante el Kielce polaco el pase a la final de la Liga de Campeones, donde el vigente campeón del torneo, el Barça, se medirá ante el Kiel alemán en la segunda semifinal (18.00/Lanxess Arena de Colonia), con la intención de sumar su undécimo cetro y convertirse en el primer equipo que logra dos títulos consecutivos desde la implantación de este formato (2009-2010).

En la primera semifinal, el Kielce polaco, de la mano del mítico Talant Djushebaev, ganador de cuatro ligas de Campeones como entrenador (3 con Ciudad Real y una con Kielce), se enfrenta al Veszprém de Corrales, que entrena esta temporada el serbo-húngaro Momir Ilic, mítico jugador del Kiel (ganó 2 Ligas de Campeones), finalizó cuarto del Grupo B y eliminó a Vardar en octavos de final y al Aalborg danés, primero del Grupo A y subcampeón de la pasada campaña para llegar a Colonia.

Cuatro jugadores son la columna vertebral del Veszprém: además de Corrales; destacan el veterano lateral izquierdo serbio Petar Nenadic (85 goles), su máximo goleador; el extremo zurdo esloveno Gasper Marguc (79 tantos); el lateral egipcio Omar Fathy (71) y el extremo izquierdo croata Manuel Strlek (68).

A ellos se une el lateral zurdo internacional español Jorge Maqueda, dos centrales de alto nivel como el francés Kentin Mahé (58 goles) y el húngaro Mate Lekai y dos pivotes como el sueco Andreas Nilsson y el esloveno Blaz Baglotinsek, todos internacionales y con experiencia contrastada.

Los húngaros, que vienen de perder la Liga húngara al encajar un gol en el último segundo ante el Pick Szeged dirigido por Juan Carlos Pastor, deberán centrarse en la defensa frente a las dos puntas de lanza del equipo polaco, el extremo zurdo Arcadiusz Moryto (65 goles), el extremo diestro francés Dylan Nahi (69), junto a los laterales Alex Djushebaev (67) y Szymon Sicko (49), piezas claves de su plantilla.