Se acabó la temporada para un Celta Zorka Recalvi que no pudo defender los cinco puntos de ventaja que hace una semana había logrado en el pabellón de Navia. No obstante, el balance de la temporada es inmejorable, pues no podemos olvidar que el objetivo primordial era lograr la permanencia en esta nueva competición que se estrenaba esta temporada.

El equipo entrenado por Cristina Cantero llegaba a Zamora con la baja de Celia García, que hace una semana sufría un esguince de tobillo que le imposibilitó jugar. Este no fue el único contratiempo del conjunto vigués, pues a los tres minutos de juego Lucía Fontela sufría un esguince, sin que volviera a jugar. Pero los problemas de las viguesas no se quedaron aquí, pues a tres minutos del final del tercer cuarto, Mariona Martín se volvía a lesionar en la rodilla de la que fue operada. Habrá que esperar a las pruebas que le realizaran la próxima semana, pero no pinta bien. Y para colmo de males, Laia Lamana tuvo que abandonar el campo durante unos instantes, al recibir un codazo y marearse.

Con todo, el partido no comenzó bien para las viguesas. Se sabía que Zamora saldría presionando mucho y, a pesar de ello, el equipo vigués no era capaz de frenar la avalancha del cuadro local, y a los cinco minutos de juego ya perdían por diez puntos. El problema, fundamentalmente, venía de la faceta ofensiva, pues el equipo solamente consiguió anotar tres puntos en esos primeros cinco minutos de juego.

Poco mejoraron las cosas antes del final del cuarto, manteniéndose la misma tónica. Catorce de desventaja que no invitaban demasiado al optimismo.

Las cosas no cambiaron mucho en el segundo cuarto. El conjunto local se mostraba cómodo, y conseguía frenar el juego ofensivo de las jugadoras viguesas, que llegaban al final de los primeros veinte minutos de juego con diecinueve punto de desventaja.

Cristina Cantero aprovechó el tiempo de descanso para hacer reaccionar al equipo. Desde luego, la salida del tercer cuarto fue totalmente distinto, con fuerza, carácter y con tiro exterior. Sin embargo, ese cambio de imagen solamente le servia para bajar de los veinte puntos de desventaja, pero sin la fuerza necesaria para bajar de los quince.

Las viguesas habían ganado el cuarto, aunque tan solo por cuatro puntos, lo que ponía el reto mucho más complicado, a tan solo diez minutos para la finalización del partido. Además, la lesión de Mariona Martín había dejado muy tocado al equipo, por lo que la cosa no pintaba bien.

Sin embargo, una de las cualidades del equipo en esta temporada, fue que nunca se da por vencido, ni cuando las cosas están imposibles. Las zamoranas bajaron la intensidad en su juego, lo que aprovecharon las viguesas para mejorar en su tiro exterior. En un visto y no visto, el partido se había apretado, y a dos minutos para el final, el Celta se pone a ocho puntos, 75-67, tres en realidad, con los cinco de ventaja que llevaban las viguesas de Navia.

El técnico de Zamora solicitó un tiempo muerto y consiguió su objetivo de que el equipo reaccionara para llevarse la victoria.

Ficha técnica

Recoletas Zamora: Waters (2), Mestres (23), Asha (8), Chizoba (15), Latorre (14)_-cinco inicial- Che (4), Gómez (3), Montoliu (6), Soledad (0) y Ajemba (5).

Celta Zorka Recalvi: Mulligan (2), Davydova (10), Fontela (0), Fequiere (12), Martín (8) -cinco inicial- Musa (10), Lamana (10), Coello (2), Visal (0) y Castro (15).

parciales: 23-9, 21-14, 22-26 y 14-20.

Árbitros: Sanhermelando García y Presseguer Bombardo. Le señalaron 18 flatas al_Recoletas Zamora y 15 al Celta Zorka Recalvi. Sin eliminadas.

Incidencias: encuentro disputado en el pabellón Ángel Nieto de Zamora, que registró una buena entrada.