El Celta anunció hace poco más de un mes la llegada desde el FC Barcelona de Raúl Rivas como responsable social y para la explotación del día de partido. Ayer, en un encuentro con los medios, el nuevo líder del área que debe trabajar con los abonados del club, explicó algunas de las líneas de trabajo que planea llevar a cabo en los próximos meses. Rivas considera “necesario” mejorar la comunicación con los socios y, sobre todo, asegurarse que todos los mensajes llegan. Sabedor de que no todos los abonados manejan las redes sociales o un correo electrónico, quiere valerse de todos los medios posibles para que la información llegue a cualquier aficionado. Otro de los puntos que pretende abordar es el de intentar generar interés en el abonado más allá de lo que ocurre en el terreno de juego. En un primer esquema que maneja, Rivas pone como ejemplo la posibilidad de que los socios participen en experiencias VIP como puede ser un lanzamiento de penalti en el descanso de un encuentro o recibir al equipo en el túnel de vestuarios cuando llegue al estadio, por citar dos ejemplos.

La semana pasada el club envió una encuesta a todos sus abonados para conocer de primera mano las necesidades de los mismos. El nuevo responsable también se mostró abierto a que se puedan liberar las localidades de aquellos socios que no puedan acudir a un partido.