Indignación en el seno del Real Madrid por el episodio surrealista vivido en la mañana de ayer con la repetición del sorteo de Champions y el cambio de rival de los madridistas para los octavos.

A las doce y media los blancos se las prometían felices al quedar emparejados con un rival accesible como el Benfica. El problema se produjo cuando el Manchester United apareció como rival del Villarreal. Al haber coincidido en el grupo, no podían quedar emparejados. La UEFA intentó resolver la chapuza adjudicándole el siguiente en salir, el City. Pero eso condicionaba los siguientes emparejamientos y comenzaron las protestas, entre ellas la de un Atlético que quedó emparejado con el Bayern.

Al final, la UEFA tomó la decisión de repetir el sorteo y los blancos, que no estaban afectados por el error del software, al salir antes, pidieron que su emparejamiento se mantuviese. Pero se tomó la decisión de repetir el sorteo íntegramente.

El enfado inicial tornó en indignación durante la mañana. Minutos después de las 13.30 horas, la delegación del Madrid, liderada por su presidente Florentino Pérez y el director de relaciones institucionales del club, Emilio Butragueño, comparecieron en la Caja Mágica para rendir su adiós a Manolo Santana. Acompañados de Antonio Galeano, director de comunicación, y Marta Santisteban, de prensa del club, los dirigentes blancos evitaron realizar declaraciones y hablaron solo para Real Madrid TV, que llegó a la capilla ardiente del tenista minutos antes que sus dirigentes.

Fuentes del club no escondieron la indignación del Madrid, que alcanzó su punto álgido tras el nuevo sorteo, al quedar emparejados con el peor rival posible, el París Saint-Germain de Messi, Mbappé, Neymar y Ramos. En los minutos posteriores, el club advirtió de que habría un comunicado.

Y pasadas las cinco se hacían públicas unas declaraciones de Butragueño en los medios del club mostrando su malestar por la forma de obrar de la UEFA: “Ha sido sorprendente, lamentable y muy difícil de entender. Teniendo en cuenta los millones de aficionados que estaban pendientes del sorteo, así como todo el mundo del deporte”. La entidad blanca intuye la sombra de la Superliga y la guerra abierta con la UEFA tras este giro que ha motivado que el Madrid juegue con el PSG y no con el Benfica.

Posteriormente Butragueño reculó: “Lo afrontaremos con ilusión, conscientes de lo que significa para este club esta competición y para nuestros aficionados. Conscientes de la dificultad del rival y la categoría de sus jugadores”. Pero lo cierto es que el Real Madrid, muy molesto, recela al tener que medirse al PSG, casualmente un club-estado amigo de la UEFA, de fair play financiero sospechoso y contrario a la Superliga. Por eso los blancos pondrán atención a la designación arbitral de esos duelos.

De Múnich a Nápoles. Ese será el rival del Barcelona en la Liga Europa. “Es difícil, ha sido un sorteo desfavorable, uno de los más difíciles. Es de nivel Champions. Complicado”, dijo Xavi.