Cristiano Ronaldo se ha metido de lleno en el mercado de fichajes cuando hace semanas casi nadie se imaginaba otra cosa que no fuese verle de nuevo con la camiseta de la Juventus. Su agente Jorge Mendes viajó ayer de urgencia a Turín para reunirse con los dirigentes del club blanquinegro y pedirles que facilitasen la salida del delantero portugués que está en negociaciones con el Manchester City e incluso se ha especulado también con un posible interés del PSG.

El problema es que Mendes pretendía llevarse a Cristiano libre sin pagar un traspaso, algo que la Juventus se ha tomado de mala manera porque entiende que,además de un negocio ruinoso para ellos, supondría darle un talón en blanco a Ronaldo para negociar una sustanciosa prima de fichaje.

Después de tres horas de reunión Mendes salió de Turín en dirección a París para reunirse con los dirigentes del Manchester City con el objetivo de presentar una propuesta en las próximas horas a la Juventus. Los italianos no piden más de treinta millones de euros pero quieren incluir a un futbolista en el acuerdo. Los ingleses ofrecen a Sterling, pero las preferencias de la Juventus apuntan a Gabriel Jesús. Sin embargo, el delantero brasileño es imprescindible a ojos de Guardiola. Ahí la operación podría encallar. Mientras tanto, el PSG –que tendrá que fichar a alguien para la delantera en el caso de que salga Mbappè en este mercado, permanece atento a la jugada por si también puede tener encaje Cristiano en su plantilla. La Juventus apremia. Si en horas no se soluciona declararán al jugador instransferible.