Los que tuvimos la suerte de conocer a Paco Martínez, sabemos que tenía dos pasiones. La primera sus hijos, por los que se desvivía; y la segunda sus amigos. Siempre recordaré su “ola meu rei” o su “rauliño”, cada vez que nos encontrábamos en una cancha de baloncesto o en la calle. Porque Paco era así, amigo de sus amigos.

La triste noticia corrió como un reguero de pólvora. Susana García, otra leyenda del baloncesto vigués, reconocía “tener el corazón roto. Nos conocíamos hace 50 años. Con el empecé a jugar en las Acacías y después volvimos a coincidir en el Celta. Fue mi maestro, y le encantaba que le llamase así. Pero nuestra relación fue mucho más allá de las canchas, teníamos una conexión muy especial”.

Quien también le conoció bien fue Floriano Fernández Pomar, preparador físico del equipo. “He de reconocer”, apuntó, “que fue el primero en meter la preparación física en el baloncesto femenino. Con una plantilla corta hicimos una grandísima temporada. Yo trabajé de maravilla con el, y confío en mi trabajo. Al margen de baloncesto ya nos conocíamos de pequeños, ya que nacimos en el Pilar. Solo puedo hablar bien”.

Las RR.SS. se llenaron de mensajes de sus jugadoras recordándole. Sara da Rocha, escribía “No hay palabras con las que pueda describir la rabia que siento porque la vida se te haya cortado así. Dejas mucho aquí, tus tesoros, que son muchos. Tus hijos, y todas esas niñas que hemos corrido, saltado, y reído a tu lado. Ahora podrás echar unas canastas con nuestra otra estrella. Miky. Y nosotras desde aquí os buscaremos y algún día...”.

Otra de sus jugadoras, Carmen Patiño decía “siempre que pienso en Paco recuerdo esos partidos en los que chillaba el nombre de una de sus jugadoras y nos veíamos unas a las otras, porque ese nombre no existía, pero él insistía. Pedía tiempo muerto y te decía, Marta tienes que defender mas fuerte, y tú le contestabas no soy Marta soy Carmen. Se quedaba viendo para ti y te seguía llamando Marta todo el partido, un crack”.

Otra de sus jugadoras fue Jimy, quien reconocía que “Paco fue mi mentor. Pero yo más que por su faceta como entrenador de baloncesto, me quedo con la persona. Era excepcional, y no puedo ocultar que fue una etapa maravillosa”.

A pesar de haber triunfado en el baloncesto femenino, el corazón de Paco también estaba con el baloncesto de chicos y su pasión por el Bosco. Sus compañero de club se despedía del en RR.SS. recordando que “la familia bosquista está hoy de luto, estamos de luto. Nos ha dejado Paco Martínez “Paquiño”, y su partida deja un gran vacío. Su alegría, simpatía, cariño, su gran sentido de la amistad y su buen hacer dentro y fuera de las canchas son difíciles de igualar. Compañero, amigo de la gran y amplia sonrisa, ahora ya camina hacia otras superiores canchas a jugar otros partidos, con otras canastas. Amigo, te vas pero te quedas, sí, te quedas por siempre y para siempre en la memoria y corazones de todos y cada uno de nosotros, tus compañeros, tus amigos, tu familia del Club Bosco de Vigo. Buen Viaje Paquiño, ¡Ah! Un último favor... Cuando te encuentres con el presi y con todos los amigos que ya antes se han ido, dales un gran abrazo de nuestra parte. Estamos seguros de que te esperan con los brazos abiertos para juntos organizar algún que otro partido en esas canchas celestiales. Hasta siempre compañero, amigo”.

También la Federación Gallega de Baloncesto publico en RR.SS. un emotivo mensaje en el que decía “Coñecedores da triste nova do pasamento de Paco Martínez, enviamos un moi forte abrazo e o noso máis sentido pésame á súa familia e achegados. O Baloncesto Vigués e Galego están de loito. Sempre na memoria o vivido e aprendido gracias ao seu traballo como adestrador e á súa paixón por este deporte”.

Alberte Zato, vicepresidente de la Federación Gallega, afirmaba ayer que “la figura de Paco Martínez es importantísima, tanto para el baloncesto vigués, primero, gallego y también al español. Con la Federación, y conmigo, siempre ha sido muy cordial, siempre colaboraba con todo, destacando por su cordialidad. No cabe duda de que era un personaje entrañable en las distancias cortas”.