El espectacular gol de Iago Aspas al Barcelona le dio al Celta un punto a la postre definitivo en la salvación del equipo y le asestó un duro golpe a las opciones de los catalanes para hacerse con LaLiga pasada. Ahora se conoce también que el empate que se sacó de la chistera el de Moaña --y que pudo culminar Nolito en el descuento-- desencadenó un cisma definitivo en la plantilla bercelonista, con hostilidades abiertas entre el entonces entrenador, Quique Setién, y la estrella del equipo, Leo Messi.

Según ha publicado la Cadena Ser, al término del partido el técnico cántabro lanzó varios reporches a sus futbolistas. Algunos, entre ellos el argentino, se sintieron atacados y ofendidos. Fuentes próximas al vestuario cuentan que Messi levantó la voz, le recriminó al entrenador sus palabras y le pidió respeto para un grupo de jugadores que lo habían ganado todo. Setién le contestó muy molesto: “Si no te gusta lo que digo, ahí tienes la puerta”.

La reacción de Messi, según la citada información, "fue mirar al entrenador y sonreír de forma compasiva", consciente de que la etapa de Setién en el Barça tenía fecha de caducidad. Desde el vestuario blaugrana se considera que el entrenador cántabro "muchas veces se excedía en sus palabras"

Esta información llega justo después de que Quique Setién rompiese su silencio tras su salida del Camp Nou este fin de semana, en una charla con Vicente del Bosque publicada en El País. En esa conversación, el técnico aseguró que "hay jugadores que no son fáciles de gestionar, entre ellos Messi".