Comienzo raro por la situación, pocos días de entrenamiento y visita a una cancha difícil después de siete meses sin tener una competición oficial. El Badajoz estuvo durante todo el encuentro protestando las decisiones arbitrales, sin que los colegiados se inmutasen. Pero el conjunto vigués no dio la batalla por perdida, en ningún momento se relajó y todo ello le permitió salir airoso.

El primer set comenzó con muchísima igualdad. Ninguno de los dos equipos era capaz de despegarse. Pequeños detalles eran los que permitían a uno u otro marcharse dos puntos, como máxima diferencia, en el marcador. La lucha, sobre todo en la red, hacia que las defensas tuviesen mucho trabajo. Esos pequeños detalles y algunas decisiones arbitrales llevaron a los locales a empatar el set a 22. A partir del 26-26 la fortuna sonrió a los locales después de 32 minutos de dura lucha.

El segundo set fue muy parecido al anterior. Empates sucesivos hasta el empate a 13. A partir de ese momento los locales tuvieron mas acierto en el saque y se pusieron 21-16. Pero los vigueses fueron capaces de ponerse a 22-21 y empatar a 24, lo que presagiaba un final de infarto como en el set anterior. Y así fue, pero invirtiendo los papeles.

El tercer set comenzó como una fotocopia de los dos sets anteriores. Los árbitros, a lo suyo, que pasaba por pitar lo que el público les pedía. Con todo los vigueses luchaban y de esta forma se llegaba al final del set en la misma situación que los sets anteriores, con final feliz para el Vigo.

El cuarto, que sería el definitivo, comenzó con igualdad en el marcador hasta el empate a seis puntos. A partir de ese momento los vigueses comenzaron a realizar un gran juego que les permitió marcharse de forma rotunda en el marcador por hasta seis puntos, 10-16. Desde ese momento el conjunto de Suso Penedo no dejo respirar a su rival y finalizó el set y por consiguiente el partido con un 1-3 que deja bien a las claras qué equipo fue superior.

Ahora toca esperar al próximo fin de semana en donde el conjunto vigués volverá a Extremadura, en esta ocasión a Cáceres.