El Coruxo logró el pase a la siguiente ronda de la Copa Federación después de imponerse al Compostela en la prórroga con un gol de Sylla tras un partido igualado y con alternativas en el que el Coruxo, sustentado por un sobresaliente Brea, fue más eficaz.

Salió con ganas el Coruxo, con un fútbol rápido y vertical que le llevó a disponer de la primera oportunidad, un disparo de Barril que puso a prueba a Anxo. Sin embargo según pasaban los minutos los vigueses se veían superados por un rival con más brío y que hizo méritos para haberse adelantado en el marcador antes de llegarse al descanso.

No debió quedar muy satisfecho el técnico del Coruxo cuando tras la reanudación ejecutó el primer cambio con la entrada de Vila para mejorar el juego en el centro del campo donde el equipo se había mostrado con poco peso. Y su influencia pareció manifestarse enseguida cuando fue el Coruxo el que salió con otro talante, con más empaque y se mostraba más solvente, aunque el Compostela seguía en buena línea y Brea tenía que lucirse despejando a córner un lanzamiento de Antas.

Estaba el partido en un momento en el que los dos equipos eran conscientes de que un gol valdría la eliminatoria y fue a balón parado como se adelantó el Coruxo con un polémico gol olímpico obra De Vicente aunque Anxo pareciera detener el balón en dos tiempos sobre la línea de gol en una acción que fue muy protestada por los locales. La respuesta del Compostela fue la de asediar el área del Coruxo en busca del empate y que consiguió por medio de Palmas en otra jugada por la banda que resolvió el jugador local dentro del área. Buscó el segundo el equipo santiagués pero se llegó a la prórroga.

Pese a que las fuerzas ya estaban justas, ambos equipos mantenían una admirable inercia ofensiva y el Coruxo se adelantó de nuevo en una jugada personal del senegalés Sylla que ganó el mano a mano con Anxo para hacer el segundo gol. Y tuvo el tercero el Coruxo para sentenciar, pero Anxo lo evitó. Al Compos ya no le quedaron fuerzas para dar la vuelta al resultado, con lo que los vigueses sellaron su pase.